Tiempo de seguir andando…
(Por Ariel Rodríguez) Apenas habían pasado tres años de la gesta de Maracaná, Rivera aún comenzaba a despertar de su siesta pueblerina, el siglo pasado apenas promediaba, el tango era rey y señor y el Bolero cautivaba corazones.
Ni soñar con la magia de la televisión, o de hablar de la llegada del hombre a la luna, Internet, no formaba parte ni siquiera de las fantasías más audaces. Así en ese tiempo nacía NORTE, por que hubo alguien que supo soñarlo, hubo un Quijote que quiso que naciera, que miró hacia delante de su tiempo y contra viento y marea Rik supo hacer realidad su esfuerzo, su lucha por darle un primero un periódico y después un diario a su Rivera, por darle un NORTE y sí que fue lejos la meta, tanto que ya casi siete décadas y sí que él dejó la huella, esas que dejan sólo los que hacen, los que construyen.
Nada ha sido fácil en este camino andado, como no lo es para ningún medio del interior, pero no hay dudas que valió la pena. De aquél lejano o tal vez cercano 1953 ha sido mucho lo que ha cambiado, algunas cosas para bien y otras no tanto.
Cuanto añoramos aquél pueblo de andar cansino por el que transitaba Rik en la madrugada en su Kombi, rumbo a la Jefatura de Policía, para tener las noticias de última hora, que salvo raras excepciones no pasaban de hechos que hoy son menores.
Cambios que se fueron dando de manera increíble y que el propio Rik supo entender cuando informatizó a NORTE, en tiempos que aún la mayoría no entendían que era lo que se venía.
Son casi sesenta años de un medio que podrá haber acertado o haberse equivocado, pero que seguramente siempre supo transitar el trillo de la dignidad, de la honorabilidad.
Son cincuenta y siete años y Maruja sigue aferrada a no dejar que el sueño flaquee, es tiempo entonces de seguir andando…
Es la primera vez que entro a la página de Diario Norte, y la verdad la emoción es mucha, pues Norte forma parte de mi vida. En primer lugar un beso muy grande y un cariño aun mayor, a doña Maruja (Mi Madrina), y al mismo tiempo un saludo a Diario Norte por sus 57 años. Vaya un recuerdo para quienes ya no están y que, en honor a la verdad fueron los dos pilares principales en los inicios de Norte. En primer lugar a don Rik Jesús Araújo (Mi Padrino), luchador incansable en procura de un sueño y en segundo lugar (y no menos importante) a don Eulogio Da Silva (Mi Padre) quien se embarcó en ese sueño y con cariño y fidelidad dejó parte de su vida y su salud para que esa realidad de hoy fuera posible. También hubieron otros, que anónimamente contribuyeron mucho a todo que todo esto fuera caminando, a veces con muchas dificultades. A los que todavía están, mi abrazo; a los que ya nos dejaron, mi recuerdo… Gracias. Un abrazo
Felicitaciones a NORTE por esa caminada de 57 años. Que continuen siempre trabajando con el mismo entusiasmo. Mi saludo especial para Doña Maruja.