Fin de semana muy importante para la continuidad celeste en el campeonato nacional

El pasado fin de semana no fue de los mejores para las selecciones celestes. No puede llamar la atención, se sabía que a partir de esta fase del certamen los rivales cambiaban y ya no se trata más de sumar puntos para clasificar en una Serie donde el segundo lugar servía para seguir en el certamen.
Los rivales son diferentes pero también había que tener en cuenta que el sistema de disputa también cambia. Ahora es de eliminación directa.
De los dieciséis que ingresaron a la segunda fase, solamente ocho seguirán, y luego cuatro y luego llegan a la final del Campeonato del Interior.
Para jugar en estas instancias hay que tener el reglamento bajo el brazo.
La definición es por puntos, luego por saldo y en tercer término por los goles conquistados como visitante, lo que comúnmente se llama (y mal) que los goles de visita valen doble.
Los mayores celestes no jugaron un mal partido en Paysandú pero tampoco contó con ayuda, que todos deben tener, del factor suerte, justamente lo contrario porque el primer gol llegó a raíz de una jugada fortuita de los sanduceros.
Al terminar la primera parte quedamos con la sensación que se podía y que solamente no habíamos tenido mejor suerte porque, en realidad, no habíamos rematado al arco contrario.
Pero el comienzo del segundo tiempo fue nefasto para los celestes porque quedamos lamentando una jugada que no terminó en gol y nos hicieron tres en doce minutos, justamente la diferencia que hubo en el partido.
Luego los dos goles nos acercaron bastante y nos deja claro que no es imposible, que se pueden lograr goles ante este equipo sanducero con el único y gran cuidado, de evitar que sus ágiles y sapientes delanteros lo logren.
En cuanto a los juveniles el resultado fue más ajustado a favor de los salteños.
Un gol celeste, en la hora de finalización del partido hizo renacer la esperanza que estaba muy complicada hasta ese momento.
Nos hicieron dos goles luego de una jugada de pelota quieta.
Tuvimos escasa actividad ofensiva y descubrimos falencias defensivas de los litoraleñas muy tarde en el partido.
Nos ganaban por dos goles de diferencia y hasta tuvieron posibilidades de alguno más, perdimos un jugador por una expulsión que no se justifica en absoluto pero que fue una correcta determinación del árbitro.
Y aprovechamos la última porque ya no había tiempo para nada más y había que jugársela.
Un centro al área, los zagueros en el área rival y solamente era necesario que la pelota llegara bien jugada, y así fue, de los pies de Brahian Goncálvez salió el disparo y la cabeza de Casiano Nogueira para un gol que fue muy festejado por aquello que mencionamos del reglamento.
Un gol de visita que nos devolvió la alegría en un partido muy complicado.
Un gol que nos puede colocar en la siguiente fase pero habrá que ganarle a los salteños este sábado en nuestro medio.