Hoy comienza el programa “Verano Educativo” de primaria

A partir de este lunes 11 de enero comienza la edición 2010 del programa Verano Educativo de primaria, que atenderá a más 31.000 niños de edad escolar pertenecientes, en su mayoría, a zonas de contexto crítico.
Unas 265 escuelas de todo el país realizarán actividades pedagógicas y proveerán de desayuno y almuerzo a quienes asistan. En tanto, 91 de esas escuelas participarán del plan piloto que busca dictar clases durante todo el verano a alumnos que repitieron, con el fin de que reciban capacitación y puedan rendir en marzo o abril una prueba que los podría hacer pasar de año.
Este lunes comienza en todo el país esta nueva edición del programa Verano Educativo, un plan estatal que está destinado a atender a la población escolar socialmente vulnerable. Se extenderá hasta el fin de la primera quincena de febrero.
Los menores permanecen en la escuela desde la hora 8.30 hasta la hora 13.00, cuando finalizan el almuerzo.
En Maldonado, comenzó el 2 de enero a raíz de un acuerdo con la Intendencia de ese departamento que busca contemplar a los hijos de aquellos jefes de familia que participan de trabajos generados en la zafra veraniega. Además, el horario en este caso se extiende desde la hora 8.30 hasta la hora 16.30.
El plazo de inscripción en todo el país caducó el viernes, pero este lunes, martes y miércoles se podrá seguir anotando a los niños, según dijo a El Espectador Oscar Gómez, integrante de Consejo de Educación Primaria.
Unos 21.000 niños participarán de actividades pedagógicas, mientras que entre 10.000 y 12.000 escolares se involucrarán exclusivamente en los espacios de alimentación.
Gómez explicó las actividades que realizarán los menores junto con los maestros que participan de esta experiencia.
“Ingresan 8.30, desayunan y luego trabajan con los maestros en lo que llamamos un ciclo estacional, es decir, el docente no está con los mismos niños las cuatro horas. Sino que está 45 minutos con cada maestro y el niño va rotando. Tiene por ejemplo uno que se especializa en la parte lingüística, en la recreación, en artes visuales, en actividades científicas. El año pasado estuve en algunas escuelas, donde aprovechando que tienen invernáculo, trabajaban en ciencias con las producción de alimentos, con el envasado de los mismos, con la conservación del envasado al vacío. O sea, cada escuela hace énfasis en lo que tiene que ver con su realidad concreta. Es lo que llamamos nosotros actividades adaptadas al medio”.
Las escuelas que participan del programa Verano Educativo fueron seleccionadas de acuerdo a un relevamiento que individualiza las zonas donde hay más necesidades básicas insatisfechas.
Según Oscar Gómez, algunos niños presentan problemas alimenticios y también altos índices de inasistencia.
“Nosotros hemos localizado a las escuelas para que funcione este programa en las zonas geográficas donde hemos detectado, en conjunto con otros organismos del Estado, índices de malnutrición, condiciones familiares que provocan asistencia discontinua de los niños. Es decir que tiene algo de reparatorio, pero por supuesto la escuela pública es abierta para que todo aquel que intente, desee, necesite que su hijo esté educado, protegido, alimentado, las puertas están abiertas. Cabe recordar que este programa tiene una larga historia y ha ido cambiando su perfil. De un programa destinado a la emergencia social, a un programa asistencialista, fundamentalmente después de las grandes crisis económicas. Ahora se le da un componente educativo que es lo que la escuela pública tiene que hacer, es su cometido”.
La edición anterior del programa Verano Educativo tuvo resultados positivos para la formación de aquellos escolares que asistieron a las escuelas.
Se registró una evolución de los niños que participaron tanto en lectura como en escritura. Pero, también los escolares mejoraron su comunicación oral. Concretamente, 70% de los alumnos mostraron avances luego de concluido el apoyo brindado por maestros durante 28 días en el verano.
Un dato importante respecto a los inscriptos en el verano 2009 es que del total de los niños que participaron en el programa Verano Educativo, el 53% fue promovido en diciembre, mientras que el 46% era población repetidora.
Es por ello que en el marco del programa Verano Educativo se trabaja con repetidores, a quienes se les imparte clases con el objetivo que en marzo o abril puedan rendir una prueba que los haga pasar de año.
Se aplicará en 91 escuelas donde se registraron los mayores índices de repetición, deserción escolar y asistencia discontinua.
“Este año el objetivo que tenemos es profundizar la propuesta educativa del programa de verano y en ese sentido vamos a continuar con un ciclo que va a tener 91 escuelas como centro para la aceleración de aprendizajes. Para aquellos niños que tienen ritmos distintos y que los nueve meses lectivos quizás no alcanzaron para tener un desempeño aceptable curricular, tienen la oportunidad, con esta extensión temporal de su actividad educativa, alcanzar un nivel de promoción y por lo menos consolidar sus éxitos y sus aprendizajes. Hay que tener en cuenta que para cada una de estas 91 escuelas habrá un director, tres maestros, dos profesores especiales y dos auxiliares de servicio. En las escuelas restantes habrá un maestro menos, dado que ese maestro va a tener la tarea de aceleración de aprendizajes en el ciclo inicial de primero y segundo año”.
Uruguay tiene altos índices de repetición en Primaria. Los alumnos provenientes de contextos socioculturales críticos son los que más tienden a repetir, según las estadísticas.
De todas formas, según los estudios realizados por Primaria, se está revirtiendo esta tendencia.