Rampla dominó el partido pero el gol fue de Cerro, que supo defender el resultado

Fue un partido similar al que vivimos hace un par de semanas cuando jugaron, esto mismos rivales en la disputa de la rueda clasificatoria.
Dominio de Rampla Juniors desde el comienzo del partido pero Cerro, en su segunda llegada al área rival, logró el gol.
La diferencia está en la capacidad individual de los jugadores, mientras que los rojiverdes no tienen uno que defina, que llegue con posibilidades firmes de concretar, los albicelestes les sobra capacidad ofensiva.
En la primera, jugada de Marcos Ramos y habilitación a Michael Ribeiro que definió apenas afuera.
En la segunda Marcio Galli y el pase al propio Michael Ribeiro que sólo, sin marca y sin golero a la vista, la mandó al fondo de la red.
Rampla hizo méritos más que suficientes para llegar al empate, incluso en el primer tiempo cuando el resultado justo hubiera sido la igualdad.
Mucho más en el complemento cuando inclinó la cancha al arco de Vagner Silveira y provocó que éste, poco a poco, se transformara en el mejor jugador de la cancha.
Sin duda alguna, Silveira pasó ser el jugador más importante hasta que cayó lesionado.
Corría el minuto 32 cuando el golero de Cerro cayó por primera vez en el partido., luego nos confesó que estaba trabajando desde las seis de la mañana y salió directamente al estadio sin almorzar absolutamente nada.
Se veía venir el cambio a pesar que Cerro no tenía golero suplente.
Sin embargo Silveira no solo se quedó en la cancha sino que tuvo un par de excelentes intervenciones en los minutos finales del partido lo que lo llevaron a ser considerado como el jugador más importante del campo de juego y responsable directo del resultado final.
Justo es decir que en los instantes finales, con Rampla Juniors jugando en terreno ofensivo, los ágiles albicelestes en la cancha, en ese momento, Matheus Guzmao y Francis da Costa, marraron claras posibilidades que hubiera permitido al equipo de Cerro, llegar en mejores condiciones al final del encuentro.
La victoria se justifica tan solo por el hecho de la eficacia ofensiva que tuvo quien ganó y que no la tuvo quien perdió.