En su despedida como Intendente, el Dr. Marne Osorio presentó un balance de su gestión

(Por Rosa Dutra) El pasado viernes, el Salón de Actos del edificio comunal se vio desbordado de autoridades departamentales y santanenses, funcionarios, representantes de instituciones públicas y privadas, autoridades militares y policiales, y público en general, quienes participaron de la despedida del Dr. Marne Osorio hasta el momento jefe comunal y de la asunción del Cr. Richard Sander como intendente departamental.
Iniciando el acto, el exintendente Marne Osorio rindió cuentas de su gestión al frente del Gobierno Departamental en el período 2015-2019. Manifestó que el trabajo fue “intenso, inmenso y muy gratificante”. Se propuso construir “una organización moderna, con conceptos renovadores: gobierno electrónico, gobierno abierto, capacitación continua, mucha calidad, evaluación por resultados y por desempeños”. Esto permitió tener servicios certificados por normas internacionales, permitió acceder a créditos internacionales para implementar programas de proyectos de fortalecimiento institucional, obtener reconocimientos fuera del país en buenas prácticas de gestión pública.
Recordó que digitalizaron la administración con el expediente electrónico y el portal web, se transparentaron los procesos de gobierno y administrativos de interés de los contribuyentes, se facilitó la accesibilidad y la interacción entre la comunidad y el gobierno. Señaló que en estos dos períodos concluyeron con una administración ordenada en aspectos administrativos y financieros. Desde una administración austera, maximizaron el aprovechamiento de los recursos, transitando el camino de la profesionalización de la gestión sin perder la sensibilidad de la cercanía con la comunidad.
Las obligaciones están al día y los créditos recuperados en todas las plazas financieras del país, por los veinte años de pago ininterrumpido de antiguas deudas. El uso del crédito permitió realizar la compra más grande de la historia en equipamientos para todos los servicios, como recolección de residuos, parques y jardines, vialidad urbana y rural, cantera, alumbrado público y barométricas, por monto de cinco millones de dólares, crédito que se terminará de pagar en la presente administración, sin dejar deudas para el próximo gobierno.
Hizo referencia al cuadro de funcionarios, de los cuales se siente muy orgulloso por tener “la camiseta de la Intendencia bien puesta”, por haber sido incansables demandantes de mejores condiciones y herramientas para brindar el mejor servicio. El número de funcionarios hoy es de 1075, de los cuales 115 son a término. Se ha logrado brindar los servicios y atender el ritmo de intervenciones en todos los frentes, preservando entre el 30% y el 40% del presupuesto para las inversiones que han permitido un salto histórico en infraestructura, en todas las áreas y en todo el departamento.
El desarrollo del departamento fue la meta, con ciudades lindas, amigables, con buena infraestructura, y espacios públicos, limpieza, alumbrado, tránsito y otros servicios que atienden a la gente. Otra meta fue atender a aquellos que están en situación de vulnerabilidad y necesitan atención a sus emergencias, procurando generar oportunidades para que alcancen la autosuficiencia necesaria y puedan prescindir de la asistencia pública.
En esos diez años fueron atendidos con servicios de comedores, merenderos y alojamiento para personas en situación de calle. También las personas con discapacidad fueron atendidas, desde la accesibilidad en espacios públicos y con servicios sociales. Se apoyó a organizaciones que trabajan con discapacitados: APADIR, ARITEA, Asociación Down, Fundación Perez Scremini y Teletón, entre otras. Con el Expreso Esperanza están presentes en localidades del interior del departamento y en seis barrios de la ciudad de Rivera. Se brindaron más de ochenta mil atenciones en salud médica y odontológica, y se atendió a la demanda de abastecimiento de agua en el medio rural, asistiendo a 75 escuelas rurales.
Fueron socios del Plan CAIF, atendiendo a la primera infancia, construyendo centros, aportando la tierra, ayudando en la construcción y gestionando dos centros: Santa Isabel y Mariamol. En los Centros Barriales se crearon espacios de interacción con las comunidades, elaborando planes de trabajo para cada centro. Se capacitó a más de cinco mil personas en artesanías y oficios. Se acompañará al CECAP en un plan piloto. Se apoya a los estudiantes y se está comprando un predio en Montevideo para albergar a más estudiantes. Los jóvenes becados en los Hogares Estudiantiles fueron dos mil doscientos cincuenta. Se los apoyó en el transporte, en parte en convenio con el MTOP y parte con recursos propios, donde se brindó aproximadamente sesenta mil becas para el transporte de los estudiantes.
Desde el deporte, hoy existe una liga de básquetbol, el mejor hándbol del interior, vóleibol, remo, tenis de mesa, patinaje artístico y una liga de fútbol barrial con más de 600 niños. En infraestructura deportiva, polideportivos, ciclovía y plazas multipropósito, presentando una política pública en deportes consolidada y una nueva realidad departamental. La oferta cultural abarca varias disciplinas: danzas, canto, artes plásticas, literatura, promoviendo la formación de nuevos talentos. El Teatro “15 de febrero” acoge una intensa actividad, recibiendo aproximadamente 620 mil personas desde su reinauguración.
Hoy hay una participación activa de adultos mayores, desde el encuentro intergeneracional, con actividades culturales, recreativas y deportivas. Se viene trabajando en la promoción de la cultura afrodescendiente, generando oportunidades para capacitaciones y respetando lo establecido en la ley referida a su inserción laboral. Se ha trabajado en la búsqueda y generación de oportunidades para alcanzar la casa propia, adecuándose a los programas diseñados a nivel nacional. Se alcanzó casi 500 viviendas nuevas, atendiendo a casi cuatro mil personas con distintas soluciones habitacionales.
La apuesta al desarrollo productivo incluye el abordaje desde varias dimensiones; la apuesta a la inversión pública que atienda a demandas de producción. En el desarrollo turístico, con buenos espacios públicos que permitan sostener una agenda turística con calendario de actividades gastronómicas, culturales y festivas, en un proceso de mejora continua. Rivera cuenta con el mejor autódromo del país, que realiza eventos internacionales con el objetivo de promover el departamento y generar nuevas oportunidades.
En materia educativa se concretó el Polo de Educación Superior, oferta educativa en clave binacional con gran proyección de futuro, en la que trabajaron muchas instituciones y desde el Gobierno Departamental se hizo todo lo posible para su concreción. Se está trabajando para la instalación de un Parque Tecnológico, con UTEC y la cooperación coreana, para generar oportunidades para muchos jóvenes, a partir de la instalación de emprendimientos empresariales mirando al Uruguay y al mundo. Se apuesta al asesoramiento y capacitación continua de productores y trabajadores del Polo de Desarrollo Agropecuario, con desarrollo de proyectos de inserción laboral para personas de contexto crítico.
Fueron desarrollados programas para profesionalizar oficios tradicionales, como carboneros, ladrilleros y modistas, mejorando su rentabilidad, y las condiciones de competitividad de la industrialización de la madera para pequeños aserraderos de todo el departamento. Se estuvo presente en el proceso de producción de la sandía, con apoyo en equipamiento y asesoramiento. Fue significativa la mejora en las oportunidades de comercialización, obtenidas en las negociaciones con el Mercado Modelo, quedando abierta la puerta para nuevos productos como melón y zapallo, entre otros.
Desde el Diálogo por el Empleo, y con una participación plural, se han generado 37 mil oportunidades de capacitación. Se ha generado un desarrollo logístico y turístico sin precedentes. Fueron entregadas 275 obras en casi diez años. En ese período se construyeron veredas, espacios públicos funcionales e inclusivos, alumbrado público, espacios deportivos, centros culturales y turísticos. Un desarrollo de infraestructura estratégico, con 7.500 kilómetros de caminería rural, la revalorización de la entrada a la ciudad, con la obra pública asociada al Campus Universitario, la recuperación del tramo urbano del arroyo Cuñapirú, con la obra hidráulica en el cauce, que redujo significativamente las consecuencias de las crecientes en sus márgenes y la angustia de muchas familias.
La intervención desde ingeniería vial atendió puntos conflictivos, reduciendo la siniestralidad, lo que colocó a Rivera como el Departamento con mejores indicadores del interior del país. Se mejoró la interconectividad, con mejores posibilidades para el servicio del transporte público de calidad. El desarrollo urbanístico y logístico fue planificado para que la ciudad resultara “cómoda, linda y agradable”, un lugar para estudiar, trabajar, formar una familia y ser felices. Además del impacto en la calidad de vida a los ciudadanos, el desarrollo urbanístico significó una importante revalorización patrimonial de los territorios y las propiedades.
Destacó los servicios que se brindan: El de higiene, que tiene un nivel de excelencia, en la recolección y disposición final, con un claro compromiso con la preservación ambiental. El servicio de alumbrado público se incrementó más del 100%. Está en proceso de cambio con tecnología LED, que alcanzará al 50% de la totalidad del alumbrado hasta el final de esta administración. Esto significa un ahorro del 25% en el consumo energético. La apuesta en el mantenimiento de espacios públicos es el empoderamiento de los mismos por las familias, como forma de una ocupación y uso positivo.
Se trabajó para fomentar la competitividad territorial. Rivera cuenta con riqueza natural, trabajadores comprometidos, una comunidad pujante, empresarios emprendedores, desarrollo académico, desarrollo logístico y un gobierno dinámico y atento. Todo esto permite tener una fuerte gobernanza en el departamento. Se defendió al comercio frente a cambios en las reglas comerciales en zona de frontera. Se trabaja para que el Aeropuerto de Rivera comience a operar en forma regular; en oportunidades de promover desarrollos con la cooperación internacional coreana y china; en oportunidades de explotación minera en Minas de Corrales o nuevos emprendimientos en la industria de la madera, con una zona franca con vocación industrial y logística, o el desarrollo de un polo termal de la mano del espíritu emprendedor de empresarios locales. Todo ello augura una transformación histórica, para que nuestra región deje de ser la Cenicienta del país y sea el centro de un polo de desarrollo para la región norte y de frontera.
Finalizó su balance agradeciendo a los riverenses por confiar en su persona y por elegirlo como Intendente en dos oportunidades; a la Junta Departamental en su tarea de contralor; a los alcaldes y concejales en la construcción de políticas de descentralización; al equipo que lo acompañó: Secretario General, Directores Generales, Coordinadores y equipo técnico; a los que conducirán al Gobierno Departamental, con el Cr. Richard Sander al frente del mismo; a los compañeros municipales con quienes se siente uno más; a todas las organizaciones públicas y privadas y a su familia: su esposa Sandra y sus hijos Brunno, Cristian y Agustina.
Posteriormente se exhibió un video con pasajes de hechos que marcaron su vida como intendente. No faltaron los telegramas, los obsequios, reconocimientos y mensajes de autoridades nacionales e internacionales, como el gobernador de Río Grande del Sur. Al frente del edificio comunal, una escuela de cuerdas y tambores izando banderas y mucha gente esperaban la salida del intendente saliente, Marne Osorio, para brindarle su apoyo.