“En un complejo Hospital como el de Rivera el funcionamiento es lo más importante”

En su participación en la media hora previa de la sesión del pasado miércoles 27 de mayo de la Junta Departamental de Rivera, el edil Dr. Antonio A. Aguirre hizo referencia a la visita del Director del Hospital, Dr. Domingo Cairelo, a dicho cuerpo deliberativo. En su alocución el referido curul señaló lo siguiente:
“Sr. Presidente, compañeros ediles, vecinos que decoran nuestra barra, fronterizos todos:
Tal lo anunciado el miércoles pasado durante la visita a este cuerpo del Sr. Director del Hospital Dr. Domingo Cairelo (en adelante el Director), inicio una serie de medias horas para puntualizar sobre todo imprecisiones y errores (u horrores) en aspectos elementales de la Administración de Salud. Por respeto a los compañeros ediles y a los fronterizos/as todos es que debemos aclarar muy bien.
Al que hoy abordaremos llamaremos: la tentación estructuralista, que a nuestro entender fue, ha sido y sigue siendo el peor error en la planificación del trabajo del actual equipo de dirección.
Esta tentación junto a la dispersión de poder son las dos ‘patologías’ que no resiste empresa alguna o emprendimiento humano alguno. Es muy común en aquellas personas que sin preparación y experiencia previa en administración, asumen un importante lugar de toma de decisiones en una empresa.
Se priorizan así aspectos de estructura sobre aspectos de funcionamiento, descuidándose temerariamente a este último; y cuando se pregunta sobre esto último (como lo dicho por el Director: quien dice no contar con un solo Anestesiólogo en el prestador integral de Rivera) se contesta con logros en la estructura como una pintura o una mejoría en la hotelería de algunas salas.
O se contesta con loables (y compartidas por todos) intenciones del nuevo sistema, o con intenciones de que así será en un futuro. Citemos un ejemplo: ‘que todos puedan elegir donde atenderse, que todos reciban una atención integral’. Lo que simplemente Sr. Presidente preguntamos es porque hay tantos fronterizos esperando para operarse, porque no hay un solo Anestesiólogo con relación laboral con el prestador integral, que se ha hecho en cuatro años con éxito para solucionar esto (ya que no es así en los prestadores integrales de todo el País). Se nos contesta entonces con el verso: ‘que todos pueden elegir’. Dije verso si Sr. Presidente. Porque hoy por hoy los pobres no pueden elegir y deben mantenerse en el llamado ‘corralito del prestador integral’ (como le llaman ahora a la vieja Salud Pública, resic). Si me dolerá esto que los jubilados de bajos recursos del CASMU se tuvieron que ir al Hospital obligados en Rivera, ¡no pudieron elegir!
A las preguntas sobre funcionamiento se nos contestó con aspectos estructurales, con buenas intenciones, o con puro verso.
Si administramos una cancha de Padel evidentemente la estructura es un noventa y pico y basta un funcionario que distribuya horarios, limpie, etcétera; pero en un complejo Hospital como el de Rivera el funcionamiento es lo más importante, a eso deben dirigirse casi todas las energías.
He tenido oportunidades de conocer hospitales de primer nivel, con Block, CTI, laboratorio y todo lo que el conocimiento científico actual permite que funcionen en una carpa.
Y lo hacen así porque donde tienen que funcionar si se esperaran las estructuras morirían muchas personas. Y las estructuras cuando luego de idas y venidas, y concensuadas y planos hechos y rehechos, si la escritura del terreno esta bien, si el predio es municipal o de del MSP, se encuentren finalizadas para inaugurar, casi seguramente no se adapten a las últimas tecnologías.
Circunscribiéndonos a la problemática del Block Quirúrgico, su administración, y la carencia de un RH que si bien no será el más importante, es limitante para el funcionamiento, en próxima aclaremos el tema de lo que el Director señaló como Anestesistas y Anestesiólogos, que llamaremos la politiquería en salud; explicando que se hubiera podido haber hecho, haber hecho y que se hizo en el fallido intento de formar en nuestro departamento a nuestros propios RR.HH. en Anestesia, tal lo que se hizo a inicios de la década del noventa con las/os instrumentadoras/es quirúrgicas/os en el Hospital de Rivera (están todas vivas y coleando, pregúnteles).
Puedo criticar Sr. Presidente, porque este servidor, ha hecho todo lo posible y a veces lo imposible para que el SNIS funcione (por mi bien, por el de mi familia y el de todos). Si bien criticamos y señalamos aspectos que hoy es claro que teníamos razón, y no pudiendo aprobar el proyecto alternativo en el cual trabajamos; una vez aprobado el SNIS hemos cerrado filas con los administradores de todos los pelos para que salga lo mejor posible. Desde el inicio le ofrecí al Director mi humilde apoyo, se lo reiteré en varias oportunidades, y nunca se me convocó a colaborar con el Block Quirúrgico. Sigo a la orden, no tengo ojos en la nuca como decía nuestro querido Wilson.
Queremos un nuevo Director para el hospital, que puede ser la misma buena persona del actual, pero con otra actitud: que deje actuar a los baqueanos, que no opine de cosas que no sabe, que se lleve mejor con su equipo, que mejore y recomponga con RRHH fundamentales que no manchan a presión porque saben que tienen la ‘la razón del artillero’ (esto último no esta en los libros de administración y si en el boliche de la administración de salud).
Pido que mis palabras pasen en tiempo real al Director del Hospital, a la Dirección Departamental de Salud, a la Dirección de Arquitectura del MSP, a los compañeros ediles departamentales y a las Juntas Locales del Departamento, al Dr. Millán Coordinador del Interior de ASSE y a los cinco Directores de ASSE servicio descentralizado-prestador integral de servicios”, concluyó el Dr. Aguirre.