Repaso de las actividades deportivas desarrolladas a lo largo del año
En esta columna repasaremos -a modo de comentario, porque listarlas una a una sería imposible por una simple cuestión de espacio- las actividades deportivas del año que finaliza, en el entendido de buscar que el año entrante sea aún más exitoso desde el punto de vista deportivo.
Y, para nosotros, lo más importante es destacar los mal llamados deportes menos, que han tenido un impulso realmente importante en el año que se va.
Es obvio que nos vamos a olvidar de muchos nombres, de muchos equipos y hasta de muchos deportes, porque no todos sienten la necesidad de promocionarlos, lo que en definitiva es el medio que tiene la población, el aficionado al deporte, de conocer lo que se hace.
Muchos son los deportistas anónimos, los grupos que no acceden a la información por una u otra razón y son tan o más importantes que los que levantan un trofeo y se sienten atraídos por un primer lugar en una tabla de posiciones.
Pero sin orden de importancia ni trascendencia, vamos a enumerar algunos que trascienden y merecen un destaque especial.
Comenzamos por el hándbol, un deporte que ha tenido un crecimiento realmente importante en nuestro medio llevado de la mano de Gustavo Laclau, que ha destinado muchos años de su vida a impulsar un deporte casi ignorado por los riverenses a un sitial de privilegio y destaque e nivel nacional.
Pasando muy rápidamente de los torneos escolares, liceales, locales e interdepartamentales a integrarse a la Asociación de Clubes de Balonmano del Uruguay a participar y con éxito en el Federal con el agravante económico de tener que viajar cada quince días para disputar dos fechas del certamen y aún así, han logrado títulos que avalan el esfuerzo y que los obliga a seguir en esta senda.
El básquetbol, que en nuestro medio había desaparecido y estaba solamente en manos de lo que podían hacer los clubes a nivel individual. Se llegaba, como máximo a Encuentros zonales y era la única competencia que podían tener quienes se dedicaban a la tarea de encestar una “naranja”. Hoy tenemos una Liga constituida, el entusiasmo de los más chicos por la motivación que brinda la competencia local y algunos esfuerzos de contar con jugadores de otros medios que vengan a demostrar algo de lo que tanto saben que en realidad están unos cuantos pasos adelante.
La idea fue comenzar por los más chicos, niños y niñas se mezclan en el rectángulo con la participación de sus padres, para quedar prendados del deporte. Hoy ya tenemos el retorno del básquetbol mayor, con las categorías absolutas de cada uno de los equipos y, para mejorar esa competitividad, la presencia de equipos santanenses.
Un proyecto que no puede bajar los brazos y al que le falta aún, el empuje final para que pueda andar solo.
El automovilismo. en su doble visión, por un lado la presencia de pilotos riverenses en el concierto nacional liderados por “los Larratea”, con un logro que es digno de mencionar y que se trata de lo que ha logrado Carolina siendo la primera mujer en acceder a un título nacional en la Asociación Uruguaya de Volantes. Con la participación de “los Rachid” en pruebas de regularidad y hasta de Capó en la experiencia de competencias de camiones realizada en nuestro medio.
Pero no podemos obviar el enorme esfuerzo que se hace a nivel local para contar con pruebas que adornen las instalaciones del Autódromo “Eduardo P. Cabrera”.
El trabajo incesante y denodado de Pablo Cabrera por mantenerlo en las mejores condiciones, y mejorarlo, pero además, por traer pruebas tanto de automovilismo como de motociclismo, que atraigan al público y que justifiquen la inversión realizada.
El motociclismo ha contado con la participación de decenas y hasta centenas de riverenses en pruebas locales y regionales de los campeonatos nacionales a nivel de la Federación y muchos de ellos traspasando fronteras con intervenciones en el Campeonato Gaúcho, pero además con lauros interesantes.
El vóleibol, con el empuje de dos referentes en el medio, como lo son el Prof. Edgar Amaral y el Lic. Marcelo Castillo. Trabajando ya sea desde la propia División de Deportes de nuestra ciudad hasta el nivel de los clubes, especialmente Sarandí Universitario que ya ha visto engalanar sus vitrinas con hermosos trofeos que ha traído desde cuanto lugar a concurrido a participar.
Luego el rugby, que ha tenido una secuencia a lo largo de estos últimos años que no ha cesado y que año a año multiplica sus adherentes desde aquellos comienzos plagados de incertidumbre de la familia González en Los Paraísos.
Hoy el rugby ya es una realidad impuesta en el medio y con proyección nacional, con muchísimos adherentes y aficionados que poco a poco se han acostumbrado a la filosofía especial que tiene el deporte.
Hay ya un interesante grupo de deportistas que han asumido la responsabilidad de proyectarlo como lo querían sus impulsores en nuestro medio y se trata de un deporte que casi ha adquirido la mayoría de edad sin la necesidad de un tutor al lardo para seguir andando.
En natación, la actividad que se cumple en la piscina de la Plaza de Deportes ocupa el primer lugar a destacar.
Un importante grupo de docentes trabajan con personas de todas las edades y que muchas de ellas van allí a realizar un deporte por mera recreación pero que siempre terminan participando en Encuentros y Competencias que siempre es bueno para la motivación y para seguir adelante con el emprendimiento.
Se cuenta además con un grupo de nadadores especialmente seleccionados que en definitiva son quienes representan a la natación riverense en pruebas nacionales de la que han participado y con éxitos interesantes.
La labor de Joselo Andrade y Laura Ospitaleche son dignas de señalar en este espacio y la coordinación general de toda la tarea del Prof. Manuel de Ávila también.
Las artes marciales, que desde ya muchísimos años se ha instalado en nuestro medio pero con la aparición de destacados Sensei para la mejor enseñanza.
Cada una de ellas tiene su espacio y no se trata de una competencia con el rival sino de la que se propone uno mismo como deportista y como persona porque no se trata de un simple deporte sino de una filosofía de vida.
La superación por ella misma, la de alcanzar los mejores logros, subir a nivel de los cinturones que son las etapas que se plantean como escalera hacia el triunfo en la propia vida de cada uno.
Y, este año, hemos tenido al tenis de mesa como la sensación que atrae a muchísimos adherentes y que seguramente ira creciendo a medida que pasen los años.
Se necesitaba un empuje para que despegara el proyecto que en su momento se firmó con la Embajada China y que buscaba la promoción del deporte en nuestro medio siendo Rivera uno de los puntos elegidos.
Había infraestructura pero no había deportistas interesados. Bastó que, a través de un colaborador permanente como lo es el “Quique” Belo, la División de Deportes de la comuna lograra traer a nuestra ciudad un curso con la presencia del mejor jugador uruguayo con trayectoria internacional, como lo es Lorenzo Lorenzotti, y a partir de esa Clínica se instrumentaron circuitos semanales llevando el tenis de mesa a todos los barrios de la ciudad y hoy ya es una realidad.
Seguramente nos olvidamos de varios. Es casi imposible retenerlos todos, pero seguramente de aquel que hoy nos olvidamos, para la próxima temporada que se inicia en pocas horas, vamos a tener la mejor información.