Perdía y descendía Frontera Rivera Chico, pero al partido aún le faltan siete minutos
En la cancha de Peñarol todo era normalidad hasta que se enteraron de la novedad que llegaba desde la cancha de Sarandí Universitario donde se había suspendido el partido.
De todas maneras, Sandro Ferreira ya había puesto en marcha el encuentro entre rojos y aurinegros y ya no había posibilidad alguna de una marcha atrás.
Para colmo de males, en el minuto 37, el ex defensor de Frontera Rivera Chico, Brahian Goncálvez anota el gol a favor de Peñarol.
Así se terminó el primer tiempo y, para el complemento, con el conocimiento del resultado que se estaba registrando en la cancha de Oriental, los rojos se fueron al ataque.
Colocaron en la cancha todo su potencial ofensivo pero hubo errores por doquier.
Por encima de todo fallaron en la definición porque hasta hubo dominio territorial y presencia ofensiva, pero los encargados de anotar fallaron.
Solamente se salvan Felipe Araújo, que, como siempre es el más vivo, el más capaz de encarar y ganar, pero además rematar y, a los 29 minutos, un tiro del chico rojo, se estrella en el parante con Juan Carlos de León vencido.
También se escapa de la crítica Yonathan Gorgoroso, que con un remate potente desde afuera del área, pegó en la parte de arriba del horizontal.
Fueron los dos únicos remates al arco rival, lo demás, nada, absolutamente nada más que dominio intrascendente y pretender acomodar la pelota, siempre para una más y allí la perdían.
En ese panorama estaban Escalante y Tenawa, totalmente improductivos para el equipo.
No pudo la fuerza ni las ganas de los otros, como Mathias Amado, Fabricio Aguinaga, y los riverenses que sienten la camiseta.
Hasta que en el minuto 38 sucede lo imprevisto (en la fotografía), que analizamos a continuación, y el partido se termina, por lo menos, por ahora.
RESTAN SIETE MINUTOS DE JUEGO
Muchas consideraciones reglamentarias de pueden hacer a partir de la decisión del árbitro del encuentro.
No sabemos, y recién esta noche lo vamos a conocer en forma oficial, la denuncia que presentará el árbitro del encuentro en relación al partido que ganaba Peñarol ante Frontera Rivera Chico por uno a cero y que Sandro Ferreira suspendió a los 38 minutos del segundo tiempo.
Todo se inició con la expulsión de un suplente de Frontera Rivera Chico.
Según el árbitro asistente, Enrique Notejane habría insultado al árbitro central, lo llamó y denunció el hecho.
Sandro Ferreira fue hasta el lugar y le mostró tarjeta roja.
Lejos de irse de la cancha, Notejane ingresó e intentó agredir a Sandro Ferreira no logrando sus propósitos, por lo menos en primera instancia, porque el árbitro dio un paso atrás.
Después hubo aglomeración de jugadores en torno a la situación y ya no se pudo ver nada más hasta que llegó la policía y dispersó el lugar.
La terna permaneció en el lugar un par de minutos pero comunicó a los jugadores de uno y otro equipo, que el partido se suspendía.
El camino hacia el vestuario no fue fácil porque varios parciales de Frontera se acercaron a recriminarle la actitud, pero la policía se mantuvo firme y llegaron otros efectivos para colaborar con la seguridad que se limitaba a tres funcionarios policiales.
Luego los parciales de Frontera arremetieron contra los jugadores de Peñarol que tuvieron que encerrarse en su propio vestuario para evitar ulterioridades.
Arduo trabajo debieron cumplir los efectivos policiales y un cordón muy amplio estuvo en la salida del Parque Pedro Maciel donde se escucharon varios disparos efectuados con escopetas de aire comprimido, para dispersar a los parciales rojos que seguían juntos aguardando la dilucidación de los hechos.
En definitiva, habrá que esperar porque es posible que este expediente pase al Tribunal para que falle al respecto de la necesidad de jugar los siete minutos restantes más los que pueda adicionar el árbitro, o se considera como un partido terminado.