Joselo Andrade está en Chile y el domingo participará en prueba avalada por la IAAF
Un atleta riverense viajó a Santiago de Chile a participar en una tradicional prueba atlética, pero no es la primera vez que lo hace y ya tiene historia en las pruebas de maratón en muchos lugares del mundo. Y es que el Prof. Joselo Andrade ha recorrido miles de kilómetros y hoy nos cuenta sobre sus comienzos.
“La historia de cómo comencé a correr viene de la época de los primeros años de liceo, ya que luego de dejar la natación por mudarme de la Unión para los alrededores del Parque Roosevelt en Canelones, hice el liceo en el Colegio Secco Illa, ubicado en la ruta 102 detrás del aeropuerto de Carrasco, y donde hoy funciona la escuela de trasmisiones de la aeronáutica”, señaló.
EL AMOR POR LOS DEPORTES
“En los cuatro primeros años, los deportes que practiqué eran justamente las carreras de fondo y la pelota de mano, ya que el frontón era el lugar más concurrido en las horas de recreos”. Los imponderables lo llevaron caminar porque justamente por esos años, entre el 1970 y 1974, los paros de transporte eran muy frecuentes, por lo que retornaba a su casa caminando y trotando, y eran once kilómetros de distancia de un punto a otro.
“Luego de culminar cuarto año, comencé los entrenamiento diarios, y participaba en la actividades deportivas de atletismo de mi nueva institución de educación, la Scuola Italiana, donde complete 5º y 6º años y ayudábamos a los grupos de liceos menores en los juego anuales de ADIC”.
Fue en ese momento que por un tema de disciplina de entrenamiento, comenzó a dejar registrado en papel, las distancias y los tiempos realizados, y de esa forma hacer evaluaciones de rendimiento y llevar un entrenamiento más controlado.
EN EL ISEF
“Llegado 1976, ingresé en el Instituto Superior de Educación Física (ISEF) donde realicé primero el curso de guardavidas, lo que me llevó un esfuerzo muy grande para llegar a tener un muy buena preparación, porque los ingresos eran a través de pruebas físicas, eliminatorias, y durante el desarrollo del curso las exigencias eran muchas”,
“Eso me llevó a tener doble horario de entrenamiento en la pista de atletismo por la mañana, y en la piscina durante la tarde. Una cosa sí tenía claro, lo mío no era la velocidad, pero si la resistencia, por lo cual en las actividades atléticas que se organizaban tímidamente por esa época en Montevideo, mis distancias eran de medio fondo y fondo”.
RECUERDOS
“Recuerdo con alegría las sesiones de entrenamiento alrededor del Parque Batlle y recibiendo las instrucciones de viejos profesores donde entre ellos se encontraba el gran lanzador Darwin Piñeyrúa”. Agrega: “De las primeras carreras de calle que recuerdo, se encuentran en Punta del Este la San Fernando, donde las primeras ediciones las organizaba por los años ‘80, Coca Cola, y se corrían por la antigua avenida Roosevelt”.
“Luego ya con más experiencia, comencé con carreras más largas, participando en varias maratones de Montevideo, con un recorrido todo sobre la costa, donde los 42 kilómetros. Se largaban en la escollera Sarandí, con vuelta a pocos metros del puente Carrasco, y finalizando en la misma escollera”.
Luego, algunos años más tarde y ya trabajando en la piscina de ciudad de Florida, y al ser una ciudad más pequeña, le daba la posibilidad de entrenar por la zona del Parque Robaina, compitiendo los fin de semanas en la diferentes carreras de calle en Montevideo donde en la mayoría de las veces eran no más que una treintena de corredores, como por ejemplo las primeras.
A NIVEL INTERNACIONAL
“Mis primeras carreras internacionales fueron en el año 1982, en la ciudad de México, en la ocasión que fui becado a través del Comité Olímpico Uruguayo, a realizar una formación para deporte de alto rendimiento, en el CEDOM, auspiciado por la OEA (organización de Estado Americanos) y avalado por el Comité Olímpico Internacional, para mejorar el desarrollo deportivo de América Latina. México ya en esos momentos contaba con corredores de primer nivel, y la motivación para la práctica de las carreras de calles, era común”.
Luego de esas primeras experiencias, continuó compitiendo en las carreras de calle, que esporádicamente se organizaban en Montevideo, como en la pista de atletismo.
“Fue así que a principio de los años 2000, me vincule con la Asociación de Atletas Veteranos, ASAVUR, compitiendo en pruebas internacionales como los Gran Prix del Mercosur, interviniendo en carreras de 10.000 y 5.000 como también, en pruebas de obstáculos y relevos, donde conquistamos con tres compañeros más, el récord Nacional de 4 x 400 en la categoría de 45 años, récord que está vigente hasta la fecha. Seguí con carreras en la zona como la maratón Fraile Muerto y Melo, donde más tarde se cambiaría de lugar y de distancia, se comenzó a llevar a con un recorrido total de 60 kilómetros, denominada ‘El hombre de hierro’”.
YA EN RIVERA
“Viviendo ya a partir de año 1986 en Rivera, participé en todas las travesías atléticas que se organizaban en ese momento, tanto en Rivera como en Livramento, viajando seguidamente a departamentos vecino, como a ciudades de Brasil”.
Señala – “Desde esos momentos y ya cuantos años más, decidí aumentar las distancias, y me convertí en ultra maratonista, término que se le denomina a todo atleta que compite en más de 42 kilómetros, 195 metros a entrenar 200 kilómetros semanales, que sumados, en el mes eran casi 800 kilómetros mensual. Esta decisión fue a causa de la pérdida constante de velocidad, lógico por la edad, y buscando no dañar tanto el físico, ya que es más fácil mantener una velocidad baja constante, que una muy rápida en corta distancia”.
PERFECCIONAMIENTO
“Años más tarde, fui designado por la IAAF (Federación Internacional de Atletismo) para cursar en Santa Fe Argentina, un curso de alto rendimiento, para lo cual los temas de la tesis final, fue justamente la marcha atlética y carreras de fondo. Más tarde comenzaron los viajes y a correr en ellos, donde los lugares más recordadas por sus características fueron, Londres, Paris, Escocia y Madrid, sin contar con algunas más en países de América”.
¡90.000 KILÓMETROS!
“El pasado 11 de noviembre de 2018, según mis cálculos, completé los 90.000 kilómetros. Corridos, tanto en entrenamientos, clases competencias, lo que para imaginar la distancia sería el dar la vuelta al mundo dos veces. Así que desde ese día en adelante, comencé en m imaginario la tercera vuelta al mundo, y como primer carrera internacional, me inscribí en los 42 K que se correrá el próximo 7 de abril en la ciudad de Santiago de Chile, que está inscripta en el calendario mundial de maratones”.
Joselo Andrade indica que “siempre me gustó correr, nunca tuve la mínima lesión o impedimento físico, nunca abandoné una prueba y siempre intente disfrutar del placer del ejercicio”.
AHORA CORRERÁ EN CHILE
Desde el lunes está en Santiago de Chile, para competir en la maratón de esa ciudad (42K).
Se larga el domingo 7 de abril, corren 33 mil atletas de todo el mundo, es una carrera oficial que está en el calendario mundial.
La semana pasada se cerraron las inscripciones con anotaciones récord para esta competencia.
“Estaré presente en la cena que se realiza siempre antes de toda carrea de importancia Pasta Party, mañana, viernes 5 de abril”.
“Hoy ya con 62 años y algunos kilómetros más, me siento reconfortado poder correr 42 K y representar a mi manera al deporte de Uruguay y en especial de Rivera”.
DETALLES DE LA PRUEBA
Organizada por la Corporación Maratón de Santiago de Chile, se correrá el domingo 7 de abril de 2019. Serán tres pruebas: Maratón (42.195 metros); Medio-Maratón (21.098 metros) y la Corrida de Santiago 10K (10 kilómetros). Las distancias de Maratón (42.195 metros) y Media Maratón (21.098 metros) han sido medidas y certificadas por la Asociación Internacional de Federaciones de Atletismo (“IAAF”).
El evento ha sido aceptado como miembro en la Asociación Internacional de Maratones y de Carreras de Distancia (“AIMS”) e incorporado a su calendario de eventos deportivos para el año 2019. La Corrida de Santiago (10K), se encuentra certificada y alcanza una distancia aproximada de 10 kilómetros.