Excelente anuncio para los chicos de la categoría sub-14 de Rivera y Young

En la sesión del Consejo Ejecutivo de la Organización del Fútbol del Interior (OFI) hubo un pormenorizado informe acerca de la actividad en las semifinales y finales del Campeonato Integración de la categoría sub-14.
Los Consejeros encargados de la tarea por parte de la Organización del Fútbol del Interior realizaron un detallado relato de todo lo vivido en esas instancias de definición.
En resumen todo lo conocido pero lo que más importa es que se mencionó que el cuerpo técnico de la selección uruguaya de la categoría sub-15 se había puesto en contacto con la dirigencia de la Organización del Fútbol del Interior.
En esa instancia se les hizo saber la firme posibilidad que varios jugadores de las selecciones de Young y Rivera serán citados a entrenar en la preselección. En principio se anuncia que serían dos, uno de cada selección, Sebastián Taffura por el lado de los younguenses e Ismael Saldivia de los celestes.
Pero no serán los únicos, habría otros más cuando la selección comience la actividad de la próxima temporada.
Las citaciones se realizarán a través de la secretaria administrativa de la Organización del Fútbol del Interior y ésta se lo comunicará a las Ligas correspondientes.

ENCONTRAREMOS RESULTADOS ALTAMENTE POSITIVOS EN LA ACTUACIÓN CELESTE

No hay duda alguna que la actuación celeste en el campeonato Integración tiene algunos aspectos altamente positivos y que no se deben medir por los éxitos deportivos, que en realidad los hubo.
No olvidemos en el punto de partida del análisis que Rivera no tiene un certamen sub-14, que el director técnico tuvo que salir a buscar jugadores que habían actuado en la sub-15, otorgando ventajas, y en su gran mayoría suplentes de sus equipos.
Jugadores recién salidos del fútbol infantil y lanzados de buenas a primeras en un campeonato nacional jugando ante rivales con una experiencia increíble.
Porque hay Ligas que están bien estructuradas a nivel de juveniles, que tienen campeonatos de muchísimas fechas, y donde los jugadores están en actividad todo el año.
Con un cuerpo de responsables que van desde el director técnico hasta un docente que controla las calificaciones y aquel que no corresponda queda “sancionado” en el plantel hasta mejorar sus notas.
Así trabaja Paysandú, que colabora con los chicos en los estudios, que tienen a disposición a un psicólogo y que tienen, por encima de todas las cosas, actividad permanente.
En Guichón lo mismo, en Salto también, y quizás los que más se parecían a los nuestros eran Artigas, Tranqueras y Tacuarembó.
Y la celeste comenzó con muchos inconvenientes, perdiendo partidos ante los mejores y tratando de acumular puntos ante los de nivel similar.
Y la lógica se dio, porque terminamos definiendo el último cupo a la Copa de Oro, jugando en casa en la última fecha ante Artigas, y nos perdimos la posibilidad de clasificar.
Nos quedaba la Copa de Plata y ahí si había que demostrar la calidad de nuestros jugadores y vaya si ha quedado demostrado porque se logra la clasificación en la Serie una fecha antes del final y cuando la celeste tenía fecha libre.
Vino entonces Tala, que nos enteramos que tiene una actividad interesante, con cerca de cuarenta partidos por año en cada una de las categorías, y terminamos clasificando en la ejecución de remates libres desde el punto penal.
Luego el enfrentamiento ante el equipo capitalino que había finalizado en la segunda posición del certamen de la Segunda División Profesional, con veintisiete partidos disputados y venían con todo el entusiasmo de llevarse la victoria para jugar la final en Montevideo.
Es más, la final estaba programada para que jugaran dos equipos de la capital, como sucedió en la Copa de Oro, y Young y Rivera fueron a Motevideo a jugar esa final programada para ellos.
De todas maneras no seríamos los mejores, como no son los mejores los de Young porque ingresamos a las instancias finales por la puerta del fondo.
Sin embargo debemos rescatar lo bueno de esta participación y la intensa actividad que tuvieron los gurises, pero además dejar demostrado que con organización se puede llegar.
Necesitamos una buena estructura, necesitamos no tirar todo el camino recorrido a la basura, seguir trabajando con esta generación, brindarle el respaldo y salir adelante sin importar el resultado final que, en definitiva, nada aportaría.