Oriental vs. Lavalleja: El viejo clásico vuelve a convocar en una nueva fecha del Clausura
Al reiterarse la disputa de la segunda fecha del Campeonato Clausura de Primera División sobresale la disputa del clásico de todos los tiempos.
Decanos y azules, los dos equipos con mayor tradición del fútbol riverense, uno con más de cien años y el otro a punto de cumplirlos, volverán a estar frente a frente. Una vez más.
Y, como todo clásico, los argumentos futbolísticos, los antecedentes inmediatos, las estadísticas, todo queda atrás porque hay un halo especial que envuelve al encuentro que reúne ambas camisetas.
En esta oportunidad Oriental está mejor, tiene consolidado a su equipo y el técnico solamente realiza algunos retoques al grupo que ya está plenamente conformado.
El decano, mientras tanto, en plena época de cambios al cambiar el técnico en la marcha del campeonato y al volver al equipo, no solo Danilo Picanzo sino que, con él, una pléyade de jugadores que siempre están a su lado.
Además hay que considerar que se juega en la cancha de Lavalleja y eso también puede ser un punto más que empareja el partido.
El clásico se juega mañana a segunda hora y en el preliminar estarán frente a frente Peñarol y Centenario.
Los aurinegros con la euforia de un excelente resultado ante Sarandí Universitario, en buen momento y subiendo de producción en pleno certamen.
Su rival, urgido por la necesidad de puntos que lo pongan a salvo del descenso y sabedores que una nueva derrota los va alejando de la posibilidad de salvarse de esa posición.
Pero hoy comienza la fecha con el encuentro entre Sarandí Universitario y Artigas con la posibilidad, para el verdiblanco, de una formal recuperación luego de algunas magras actuaciones.
Pero teniendo en cuenta que el rival es durísimo, férreo en la marca pero con carencia ofensiva a lo que hay que agregar la suspensión automática de Gabriel Hugo Pérez.
El otro partido, rivales directos de la lucha en la parte baja de la tabla y una verdadera final para Huracán y Cuñapirú que están obligados a ganar.
El que pierda se va quedando pero el que gane, seguramente se irá arriba en la tabla del descenso y prácticamente quedará a salvo del cambio de divisional.