Cuñapirú obtuvo tres puntos que le permiten un alivio

El triunfo, claro e inobjetable del equipo de Cuñapirú le permite respirar con tranquilidad en el final del certamen y si bien es cierto aún no ha zafado definitivamente del descenso, estos tres puntos logrados ante Nacional alientan la esperanza de enfrentar con alivio lo que resta del certamen.
Cuñapirú fue más de principio a fin y la resistencia que poda ofrecer Nacional se vino a tierra con el primer gol de los tricolores militares.
Ya a partir de ese momento la victoria aparecía como una posibilidad muy firme.
Jugar ante un equipo ya descendido tiene este tipo de inconvenientes que se pueden transformar en facilidad.
Así como Frontera no lo pudo vulnerar en todo el primer tiempo y hasta fue Nacional que logró la apertura del marcador, en este caso no hubo esa chance y Cuñapirú fue quien impuso el ritmo del partido y hasta de los goles.
La diferencia fuer creciendo no solo en la cancha y con acciones de juego sino que también en el propio resultado del partido.
Cuñapirú, conforme, bajó los brazos cuando pudo haber logrado una diferencia mayor y posibilitó que Nacional se le acercara en el tanteador pero sin llegar a inquietarlo en ningún momento.
Cuatro a dos fue el resultado final que deja a Cuñapirú en mejor posición que la semana pasada y que es un alivio para la difícil lucha por no descender.
Los tricolores militares se vieron favorecidos con el resultado adverso de Frontera Rivera Chico uno de los rivales directos en esa lucha.
Lo de Nacional es simplemente meritorio porque ya sin chance alguna, siendo ya un equipo de la Divisional B para la próxima temporada, se presenta con dignidad, con pundonor lo que no llama la atención teniendo en cuenta la conducción que tiene el equipo desde el punto de vista directriz.
Un equipo que ya piensa en el torneo de la B de la próxima temporada donde, seguramente vendrá la renovación con la presencia de los juveniles que vienen siendo el cimiento del futuro tricolor.