Centenario y Huracán disputaron un partido parejo y el empate se justifica plenamente
Fue un partido parejo de principio a fin aunque en todo momento quedaba la sensación que Huracán podía liquidarlo a su favor.
Estuvo más cerca del triunfo que Centenario e incluso comenzó ganando antes de los diez minutos de juego.
Pero antes de los veinte, Centenario lograba el tanto del empate con que se llegó al final del primer tiempo.
El ingreso de Giovanni Fernández en Huracán dejaba la clara sensación que el equipo de Danilo Poschi buscaría definirlo a su favor.
Con más hombres en ofensiva, con mayor presencia en las cercanías del área de Centenario lo buscó hasta encontrar el segundo.
Iban apenas ocho minutos y quedaba la sensación clara que difícilmente se le iba a escapar el triunfo de sus manos.
Pero Centenario recordó el partido de la semana anterior ante Oriental y encontró restos físicos donde no parecía haberlos.
Los minutos finales fueron realmente dramáticos para unos y otros, por un lado Huracán que buscaba mantener el resultado parcial de triunfo.
Retuvo la pelota, paralizó el partido cuantas veces pudo ante la falta de actitud del árbitro del encuentro que lo permitió en todo momento.
Por otro, Centenario que buscaba llegar al arco de Freitas pero que no acertaba el camino.
A los cuarenta minutos de juego se pierde la gran oportunidad del empate cuando el delantero quedó solo frente al arco y remató mal.
Pero hubo revancha porque un par de minutos más tarde una nueva jugada ofensiva y la pelota se quedó en los pies de Luis Eduardo Silva quien no perdonó ante un indefenso David Freitas que nada pudo hacer.
Merecido el empate para Centenario y castigo muy fuerte a un equipo que no quiso jugar los últimos minutos de juego cuando, de haberlo hecho, quizás pudo haber obtenido el triunfo deseado.
Queda probado, una vez más, que la mejor manera de hacer pasar el tiempo es jugando.