El Dr. Antonio Cabrera es el nuevo subdirector del Hospital
Finalmente el fin de semana último, fue completado el cuadro de dirección del Hospital Departamental, tras la designación del Dr. Juan Segura como Director y los alejamientos sucesivos de los Dres. Bernardo Hoschman de la subdirección, Mercedes Burastero primero como Directora y luego como subdirectora y Marisa Sánchez como administradora.
El Dr. Antonio Cabrera fue designado subdirector, Richard Alvez, cumple el rol de médico adjunto a la Dirección, mientras que Leonardo Acuña es Administrador interino mientras se cumplen con los requisitos de estilo para la designación del nuevo jerarca.
Preguntado respecto a otros cargos, cuya designación es de resorte interno, el Dr. Antonio Cabrera, tomó como ejemplo el del Dr. Ricardo Araújo, quien se desempeña como jefe del block quirúrgico, dijo que se trata de un de los colaboradores más fuertes que tiene la Dirección y uno de los pilares, conjuntamente con el movimiento de los usuarios de la salud, para ayudar a resolver el problema de los anestesistas.
Recordó que se trata de un problema que se arrastra de muchos años, por el que han luchado una tras otra las diferentes direcciones y recordó que siendo él el Jefe de emergencia, durante la Dirección del Dr. Hugo Montero, ya tenían ese problema.
En ese momento, recordó que contaban únicamente con el Dr. Roberto Eula y destacó que después llegó el Dr. Miguel Dutra de quien dijo “ha llevado a hombros la anestesiología del hospital”.
Sostuvo que se trata de un problema histórico que tiende a resolverse con la incorporación de residentes y tres anestesistas titulados.
En cuanto a rumores que trascendieran en las últimas horas dando cuenta que en la Mesa Política del Frente Amplio, uno de sus integrantes habría indicado que Cabrera ya no representa al Partido Socialista, el Profesional indicó que entiende que no es así, dijo que sigue vinculado a lo que es el Espacio 90, manteniendo una excelente relación con el Partido Socialista, al punto que concurre a cuanta reunión es invitado por parte de esa fuerza política.
Sostuvo que no siempre las personas son queridas por todos, subrayando que queda claro que si el Partido Socialista no quiere que lo representen, no lo va a hacer.
Entiende que la persona que realizó esas declaraciones, que según dijo no sabe quien es, debe hacerse responsable por su dichos o de pronto se mal interpreto lo que dijo esa persona.
En efecto, desconozco si las personas que han sido designadas para ocupar los cargos de responsabilidad en la dirección del Hospital, son cirujanos o si tienen formación académica alguna, lo citaba tan sólo a modo de ejemplo, pretendiendo con ello, dar como ejemplo, hasta qué punto se puede llegar a discriminar a una persona por su filiación política. Pero, por sobre todo, agradezco la oportunidad de poder replicar los cuestionamientos surgidos, me congratulo de que más allá de las discrepancias que las habrán, sin dudas, la inquietud y participación demuestran una actitud más activa de lo que hubiese imaginado.Gracias a todos.
Más allá del politikismo que dice José, y comparto, no hay que olvidar que todos los médicos tienen intereses particulares y personales. Muchos estudios médicos se realizan en clínicas privadas que contratan con Salud Pública, y muchas veces los propios dirigentes de Salud Pública son a su vez dueños de esas clínicas particulares. Ojo, mucho ojo con la salud-negocio. Saludos.
Comparto plenamente el punto de vista de Víktor. No se si tenemos alguna eminencia en cirugía o en alguna otra especialidad. Simplemente opino que nuestro Hospital sigue mal y no despega porque tiene un mal endémico: la «politikitis».
Llevamos 25 años de gobiernos nacionales -colorados, blancos y frentistas- y seguimos con más de lo mismo, o más precisamente, con peor de lo mismo.
Nuestro hospital se transformó lamentablemente en una agencia de colocaciones de empleos políticos, donde los criterios político-partidarios están por encima de los criterios técnicos. Es más importante hacerle el mandado al partido de turno -o criticar como oposición de turno- que atender con criterio científico las necesidades de la población y las necesidades presupuestales, administrativas y técnicas del hospital.
Como está teñido de «politikismo», los esfuerzos por bregar por un proyecto departamental que pudieran haber existido, o son demasiado tímidos o caen en el olvido o en el descrédito.
Tengamos la esperanza de que el Dr. Segura y el Dr. Cabrera, a pesar de surgir de un nombramiento político, puedan escapar de esa clasificación y emprender una tarea colectiva desprendida de sectarismos partidarios.
viktor, a quien calificas como eminencia en cirugia y posible director del Hospital?
Me pregunto lo siguiente: si tenemos a una eminencia en el campo de la cirugía y por todos es conocida su filiación y militancia, ¿habremos de vetarle para ocupar un cargo al frente de una Institución?, ¿en qué puede resultarle nociva su corriente de opinión a una Institución?, creo que ya es hora de ir superando viejos tabúes, de no sentirnos diferentes por nuestra filosofía, religión, color, clase social, etc., sobre todo en sectores, «no estratégicos» desde el punto de vista político, como es, por ejemplo, nuestro Hospital. ¿Qué más da que sea Blanco, Colorado, Frenteamplista, Ecologísta, Agnóstico, o…,?, tan sólo esperamos una buena gestión, sin más, por supuesto que aspiramos a muchísimo más, pero una gestión honrada, honorable y eficáz, contribuiría mucho más a la imagen del Hospital que cualquier campaña que se pudiese llevar a cabo. O sea que…, a trabajar