Vendedores de la terminal de ómnibus deberán dejar el lugar
Tras confirmarse la decisión del ejecutivo comunal de reiterar el llamado a licitación para explotar el servicio de cafetería en la Terminal de Ómnibus, lo que es una necesidad imperiosa, los vendedores que desde muchos años trabajan allí, deberán dejar el lugar.
Carmen Ferreira hace treinta años que vende en la Terminal de ómnibus, empezó casi una niña, expresó que “el Jefe nos informó que se va a instalar una cafetería, por lo que debíamos firmar un papel para retirarnos en el momento que empezara la cafetería. Nos dijo que pensáramos, que al otro día lo entregáramos”.
“Al otro día le dije que no lo había firmado pero que al momento que se instalara la cafetería si me tengo que retirar lo hago. Mi problema es que de esto yo mantengo a mi familia. Tengo cinco hijos, de acá pago casa, agua, luz, mantengo la casa. El padre de mies hijos me ayuda, pero vive de changas, a veces me ayuda y otras no”, finalizó.
INTENDENCIA DICE QUE
ADVIRTIÓ DE SITUACIÓN
A su vez el Director de la Terminal de Ómnibus, Jorge Armand Ugón dijo que “realizaremos el llamado a licitación por segunda vez debido a que lo hicimos el año anterior, pero no se presentó nadie debido a que el período de explotación del servicio finalizaba con el período de gobierno, por lo que se reducía a tan sólo unos meses.
Ahora se abre nuevamente la licitación y tenemos optimismo que se van a presentar varios oferentes, incluso ya hemos podido ver algunas maquetas que proyectan un espacio muy bien logrado, que realmente le cambiarían la vida a la terminal, además de ser un servicio que se debe prestar, más allá que ya se hable de la posibilidad de una nueva terminal, pero con lo que tenemos hoy pensamos que la cafetería sería un gran aporte, brindándole la comodidad que necesitan los pasajeros que llegan o salen del departamento.
Los vendedores ambulantes en la terminal han sido un verdadero problema. El año pasado cuando asumimos en setiembre había muchos vendedores, que hacía muchos años trabajaban aquí, pero de manera desordenada. Fue por ello que los llamamos a efectos de organizarlos y tras una reunión, se les pidió que quienes estaban interesados en seguir trabajando realizaran una solicitud, presentándose tres o cuatro, entre os cuales estaban los dos vendedores que están hoy, Carmen y Jorge.
Se hicieron los trámites, incluso el carné habilitante para trabajar con productos alimenticios, advirtiéndoles que la intención de la Intendencia era realizar un llamado para la explotación del servicio de cafetería, por lo cual a partir de ese momento no iban a poder continuar, a la vez que les recordamos que la Intendencia se reservaba el derecho de retirarlos cuando lo entendiera conveniente, en el marco de un reglamento de la terminal aprobado por la Junta Departamental.
Seguramente ahora no recuerdan que se lo leímos. Realmente nos sorprendió cuando se negaron a firmar una declaración jurada que nos pedía la Dirección de Tránsito, por lo que se lo eleve a las jerarquías sin esas firmas.
De mi parte lo que he sugerido es que la empresa que explote el servicio de cafetería absorba a estos dos vendedores como empleados, trabajando en el lugar de embarque. Muchas personas no suben al lugar donde está la cafetería pero si le compran a un vendedor que se acerca y más en el caso de ellos que conocen el servicio y lo hacen muy bien, incluso sugerí que en el pliego licitatorio se estipule que se los tenga en cuenta.
Aparentemente ellos no quieren ser empleados, quieren seguir siendo independientes. En definitiva deben aceptar que esto es un bien municipal, tiene dueño, por lo que no pueden disponer por sí. Espero en definitiva que esto se resuelva de la mejor manera posible.