Todas las unidades penitenciarias dependerán del Instituto Nacional de Rehabilitación

En el marco de la reforma penitenciaria en marcha, más de 70% de las personas privadas de libertad pasaron a depender del Instituto Nacional de Rehabilitación (INR). El Ministro de Interior, Eduardo Bonomi, dijo que el Gobierno logrará que todos los centros queden fuera de la órbita de su cartera antes de finalizar su mandato y que los encarcelados con condena firme serán separados de los que aún tienen en procesos su causa.
El ministro Bonomi aclaró que en esta administración de Gobierno conducida por José Mujica se decidió retirar a los centros penitenciarios de la órbita policial para ponerlos bajo la dependencia del INR, un organismo de carácter civil y de funcionamiento descentralizado.
Hasta el momento ya no dependen de la policía más de 50% de los centros, que cobija a más de 70% de la población privada de libertad.
Bonomi aseguró que al finalizar el gobierno de Mujica se cumplirá con el objetivo trazado de que el 100% de esta población carcelaria deje de depender del Ministerio del Interior.
Se dice (en campaña electoral) que se diseñará una reforma penitenciaria muy similar a la que ya se está ejecutando e, incluso, está próxima a finalizar, destacó Bonomi.
Por otra parte, explicó que se trabaja para que los médicos penitenciarios no se ocupen más de la atención de la salud de estas personas recluidas sino que sean profesionales de la Administración de Servicios de Salud del Estado (ASSE).
Los médicos penitenciarios se desempeñarían en el Hospital Policial. Bonomi aseguró que se avanza en ese sentido, así como en procura de mejor calidad de la atención de las personas privadas de libertad.
Asimismo, recordó que en su momento fue criticado por no separar a las personas procesadas de las penadas. Sin embargo, explicó que la Unidad Penitenciaria Punta de Rieles cuenta solo con población con condena firme, y que aún se trabaja para replicar la experiencia de separación en los demás centros.
“Hasta ahora se logró, en Libertad y COMCAR (Establecimiento Penitenciario Santiago Vázquez), dividirlos por módulos (un módulo o piso para penados y otro para procesados). Se sigue trabajando pero se avanzó mucho”, insistió.
Agregó que este año la apuesta es a mejorar las condiciones de salud, comenzando por la calidad de la alimentación que reciben las personas privadas de libertad, seguido por la salud bucal, en alusión al reciente convenio firmado con el Ministerio de Salud Pública, ASSE y la Facultad de Odontología.
Bonomi resaltó que estas acciones permiten la atención odontológica de esta población en los centros de privación de libertad, garantizando una mejor reinserción social y laboral.