Motín en la Cárcel Departamental

Una vez más la situación en la cárcel departamental, es motivo de preocupación. Sobre la hora 17.00 de ayer, luego de la visita, un ajuste de cuentas entre presos, determinó la actuación de efectivos de radio patrulla, seccional primera y bomberos.
Las informaciones oficiosas indican que todo comenzó por las disputas, entre presidiarios del pabellón Nº 3, en donde se encuentran los reclusos de mayor peligrosidad. Los inconvenientes determinaron que los reclusos intentaran salir del pabellón, lo que resultó en la pronta actuación de diferentes unidades de Jefatura de Policía, Cuerpo de Bomberos, así como del Juez Letrado de 2do. Turno, Dr. Rodolfo Souto, quien entiende en la causa. Precisamente el magistrado, destacó la actuación policial.
Fueron momentos de mucha incertidumbre, ya que como es habitual en estos casos es muy poca la información que se recibe y no se sabía exactamente el motivo del operativo. Debemos sumar a esta situación, que como es habitual, los días domingos, el centro de la ciudad está repleto.
En principio fueron entre ocho y diez los involucrados en los sucesos, uno de ellos herido por una bala de goma -las que se usan dentro del recinto carcelario-, mientras que otro de ellos, resultó con lesiones leves, como consecuencia de los enfrentamientos.
Fueron momentos de mucha tensión, en donde especialmente los vecinos, soportaron momentos de zozobra, lo que lamentablemente se reitera con una frecuencia alarmante.
A esta altura es insoportable tener un presidio en pleno centro de la ciudad, extremo que por el momento no ha terminado en situaciones graves, las que lamentablemente están latentes.
Rivera tiene una cárcel que fue construida para no más de ochenta reclusos y hoy supera los doscientos cincuenta. En os últimos tiempos se ha insistido con que el gobierno ha presupuestado los recursos necesarios para la construcción de un nuevo recinto, pero lamentablemente ello no ha pasado de enunciados y discursos, que al menos por el momento no se han plasmado en realidad.
Según fuentes oficiosas, además de los dos heridos, los ocho involucrados restantes, fueron derivados a seccionales policiales, en donde cumplirán sanciones disciplinarias.
A pocas semanas de haber asumido como Jefe de Policía, el Insp. Ppal. Heriberto Fagúndez y su comando se enfrentan a una dura realidad que tiene que ver con la superpoblación en la cárcel departamental.