En nuestro país existen centros deportivo-recreativos desde hace más de cien años y hasta el día de hoy constituyen una de las principales opciones para que niños, jóvenes y adultos realicen actividades físicas y practiquen deporte en un entorno seguro. Más de quince mil estudiantes de enseñanza secundaria y UTU utilizan estas instalaciones y más de veintinueve mil niños y adolescentes participan del programa “Tirate al Agua”.
“La expresión más contundente de la educación física comunitaria se dio con la instalación de las plazas de deportes, que surgieron como consecuencia de una política pública impulsada por el estado batllista, asociada al liderazgo de la sociedad civil local conformando Comisiones Departamentales”, explicó el coordinador del Área Deporte Comunitario, Miguel Blasco.
Con la creación en 1911 de la Comisión Nacional de Educación Física (CNEF), estas plazas se constituyeron en centros cívicos donde niños y jóvenes aprendieron a jugar y competir, pero por encima de todo asumir responsabilidades, convivir y a compartir, precisó.
Desde los años setenta hasta finales de los noventa, las Plazas de Deporte experimentan un largo período de deterioro, enmarcado en la crisis y el deterioro social de aquellos años. Con el primer gobierno frenteamplista, comienza un proceso de actualización de las plazas que incluye el cerramiento y climatización de piscinas, construcción de nuevos gimnasios cerrado y mejoras en vestuarios, así como la modernización de la gestión y la asociación público-privada, siendo paradigmático de este desarrollo además de una fuerte inversión en infraestructura y recursos humanos.
“Hubo un incremento significativo de la inversión, que multiplicó por nueve la ejecución presupuestal de la Secretaría, alcanzando los 12,5 millones de dólares al año”, dijo el Gerente General de la Secretaría Nacional del Deporte, Daniel Daners. La inversión en docentes, personal médico, técnicos y profesionales, además de funcionarios administrativos y de servicio es cercana a los 12,5 millones de dólares anuales.
Daners adelantó que en 2018 la Secretaría Nacional del Deporte abrirá un llamado a empresas para la adjudicación de tres nuevas pistas de atletismo, en los departamentos de Paysandú, Durazno y Montevideo, así como una nueva licitación de Estaciones Saludables, que serán distribuidas en todo el interior del interior.
El principal desafío de esta administración es la descentralización de la gestión de las 97 Plazas de Deporte, en acuerdo con los gobiernos departamentales y locales, desarrollar la capacidad de rectoría deportiva y fortalecer la participación ciudadana.
ACTIVIDADES GRATUITAS DE “TIRATE AL AGUA” DEMOCRATIZAN LA ENSEÑANZA DE LA NATACIÓN
De diciembre a marzo se desarrolla el programa “Tirate al Agua” en 22 piscinas gestionadas por la Secretaría Nacional del Deporte, otras cuatro gestionadas por Intendencias, y en un sector de playas inclusivas en Malvín (Montevideo) y Maldonado.
“Es un programa de alto impacto -calificó Blasco- ya que democratiza el acceso a la enseñanza de la natación y otras actividades acuáticas con un sentido amplio e inclusivo”. De esta manera en un país costero y con una red hídrica tan extendida, la población puede acceder de forma gratuita, hacer un uso seguro y placentero de este recurso natural, prevenir ahogamientos y descubrir el gusto por deportes acuáticos.
Para asegurar el carácter educativo de este Programa, la Secretaria contrata durante los meses de verano a 250 funcionarios que se suman a los 500 que prestan funciones todo el año en las Plazas.