Intendencia Departamental busca acuerdo con INAU por ex Hogar de varones

La Dirección General de Promoción y Desarrollo busca alcanzar un acuerdo con el INAU, a través de un comodato para acceder al ex local del Hogar de varones ubicado en carretera al Aeropuerto. NORTE dialogó con el Cr. Giovani Conti, Director General de dicha dependencia, quien al respecto señaló que “Por el momento hemos enviado una carta al Directorio del INAU para solicitar en comodato, la chacra donde funcionaba el hogar de varones, en carretera al Aeropuerto. La idea es instalar allí la División de Apoyo al Desarrollo Integral (DADI), lo que ha significado mucho entusiasmo por parte del equipo de trabajo”.
“En estos momento la División maneja varios proyectos, entre ellos desarrollar experiencias de trabajo con el asentamiento que está cercano al predio. La intención es tomar como espejo lo que es hoy la Escuela de Ladrilleros, para alcanzar resultados similares en materia de producción. Por el momento estamos esperando si el INAU acepta la propuesta. Por ahora hemos mantenido contactos nada más que con la Directora del INAU en Rivera”, dijo.
Preguntado respecto al tema de la instalación de un frigorífico en el ex predio del Abasto Municipal, el jerarca expresó que “ya están otorgadas todas las autorizaciones pertinentes, la que han insumido un buen tiempo y ahora resta la concesión de un crédito por parte del Banco de la República, en función que de un proyecto inicial de casi dos millones de dólares, se pasó a ocho”.
“Se está a la espera de ello, al punto que el propio Intendente se reuniría con el Directorio de Banco a efectos de interiorizarse del tema y si es posible agilizar la concesión del mismo, a efectos que se concrete el proyecto”, indicó.
En cuanto al curso de cerámica en ladrillos, que se desarrolla en la Escuela de Ladrilleros, Conti dijo que “la actividad ya comenzó hace dos semanas. Recordemos que se trata de un curso en el que se hace murales de cerámica esculpida en ladrillos. Es bueno destacar, que de un cupo inicial de veinte personas, del que se destinaron cuatro para personas discapacitadas, finalmente fueron siete”.
“Entendemos que puede haber un buen mercado para el producto partiendo de la base que la familia del ladrillero ya sabe trabajar el ladrillo. Seguramente comenzaremos atendiendo la demanda local para luego ofrecerlo al mercado nacional que hoy tienen los ladrillos de Rivera”, finalizó.