Entrega de 31 viviendas a familias en realojo de asentamientos en Tacuarembó

El pasado viernes 11 de octubre, la ciudad de Tacuarembó fue testigo de un importante avance en el mejoramiento de la calidad de vida de 31 familias que, por años, residieron en condiciones precarias en los asentamientos La Calera y Los Molles. En una emotiva ceremonia, se entregaron las viviendas en el marco del Plan Nacional de Relocalizaciones, parte del Plan Avanzar, en una iniciativa conjunta entre el Ministerio de Vivienda y Ordenamiento Territorial y la Intendencia Departamental de Tacuarembó.
El evento, que contó con la participación de autoridades nacionales y departamentales, simbolizó el cierre de un capítulo para las familias del asentamiento La Calera, que fueron completamente realojadas. Además, se avanzó en la integración de algunas de las familias de Los Molles, con la promesa de que el trabajo en este asentamiento finalizará durante el actual período de gobierno.
El Ministro de Vivienda y Ordenamiento Territorial, Raúl Lozano Bonet, subrayó la relevancia de esta entrega, asegurando que no se trata solo de una ceremonia más, sino de un cambio radical en la vida de las familias beneficiadas. Por su parte, la titular de la Dirección Nacional de Integración Social y Urbana (DINISU), Florencia Arbeleche, elogió el esfuerzo coordinado de los equipos técnicos que, tras más de dos décadas de trabajo, lograron soluciones habitacionales dignas para las familias. Además, adelantó que se entregarán canastas de materiales a los hogares que aún permanecen en los barrios, para facilitar la regularización de sus viviendas.
El Secretario General de la Intendencia de Tacuarembó, José Omar Menéndez, destacó la importancia de esta intervención, calificando las viviendas como “dignas y de calidad”, y subrayó el esfuerzo conjunto entre la Intendencia y el Ministerio de Vivienda. Asimismo, la Vicepresidente de OSE, Susana Montaner, expresó su satisfacción al ver la alegría de las familias al acceder no solo a viviendas adecuadas, sino también a servicios esenciales como el agua potable y saneamiento.
Este proyecto, enmarcado en el Plan Avanzar, es un ejemplo del impacto positivo que las políticas públicas pueden tener en la mejora de las condiciones de vida de las familias en situación de vulnerabilidad. Con la promesa de continuar trabajando en la integración urbana y social, se espera que el proceso de regularización de los asentamientos restantes avance en los próximos meses.