Entrega a la comunidad de la Plaza y Complejo Polideportivo Don Bosco
En la mañana de ayer se procedió a realizar la entrega a la comunidad de la Plaza y Complejo Polideportivo de barrio Don Bosco.
Esta obra, en su primera fase, fue pensada para el barrio y para la ciudad en general, brindando espacios deportivos y recreativos para todas las edades.
La obra consta de vestuarios con servicios higiénicos femenino y masculino; baño para discapacitados; oficina (guarda pelotas). Está diseñada con equipamiento anti-vandálico (mesada y banco de vestuario de hormigón, mamparas de chapa, cisternas escondidas y puertas de hierro), e iluminación LED, lo que redunda en un ahorro energético.
Cuenta con tribuna para ciento cuarenta personas frente a la cancha grande; terraza-mirador hacia las canchas, con accesibilidad para discapacitados. Son cuatro canchas: dos de fútbol de campo, una de básquetbol/hándbol y una de voleibol. Además hay seis aparatos de gimnasia en la plataforma deportiva.
Por su parte, el Rincón Infantil tiene seis hamacas chicas y seis hamacas grandes, dos toboganes y plataforma «castillo». Tiene acceso independiente sobre la esquina. Incluye espacios de asiento para disfrutar y con dameros para juegos de damas.
Se realizó el tratamiento paisajístico, con el fin de ordenar la circulación y embellecer el espacio, reforzado con una iluminación de los plátanos. Se implementó la iluminación decorativa y peatonal con “globos”, además de la iluminación de las canchas para usos nocturnos.
Se trata de una obra con accesibilidad en todo su desarrollo, y el acondicionamiento y mejora del sistema de alumbrado público en calles del entorno de la plaza. La inversión de la obra fue de cuatro millones de pesos.
Esta obra y proyecto ejecutada por la Dirección General de Obras a través de la Unidad de Proyectos, hizo parte del Presupuesto Participativo y pudo llevarse adelante gracias al aporte que hicieron los Salesianos al ceder a la Intendencia Departamental el espacio para construir esta plaza y polideportivo que hoy es una realidad. Fotografía: Edilberto Chalela.