Uruguay Integra inicia segunda fase de ejecución de proyectos en el interior rural

El Programa de Cohesión Social y Territorial de OPP Uruguay Integra comienza una nueva etapa con la firma de 10 acuerdos para la concreción de proyectos de interés social en el interior rural del país. Las iniciativas incluyen atención sanitaria, capacitación para el empleo de jóvenes y mujeres, y mejora de hábitat y convivencia. El Gobierno y la Unión Europea (UE) se encargan del financiamiento en proporciones similares.
Uruguay Integra es el Programa de Cohesión Social y Territorial del Área de Políticas Territoriales (APT) de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP). Trabaja en forma articulada con la Unión Europea, que financia parte de los proyectos, así como con intendencias y ministerios. En una primera etapa (período 2008-2012) impulsó diversos proyectos de interés social. La iniciativa, que cuenta con fondos de proyectos de compensación territorial, se originó a partir de la identificación por parte de técnicos del programa, del indicador de cohesión territorial y la estratificación de departamentos según dicho indicador.
El próximo jueves 5 de setiembre a las 10:30 horas en Torre Ejecutiva se concretará la firma de los convenios entre OPP y los intendentes respectivos para el inicio de diez nuevos proyectos que se desarrollarán durante dieciocho meses. De esta forma comienza la segunda fase del plan.
El coordinador del programa, Carlos Fagetti, informó sobre los nuevos proyectos en el interior del país. En esta instancia se seleccionaron diez departamentos, dentro de los cuales se priorizó inicialmente a Rivera, Tacuarembó, Artigas y Cerro Largo. En una segunda prioridad: Salto, Paysandú, Durazno, Treinta y Tres, Rocha y Canelones. A equipos técnicos de esos departamentos se les solicitó que presenten iniciativas vinculadas con atención primaria de salud y salud rural; formación y capacitación para el empleo de jóvenes y mujeres; mejora del hábitat y programas de convivencia. “Los fondos son destinados a iniciativas del interior rural de estos departamentos y de las localidades del interior de estos departamentos”, aclaró el entrevistado.
Las propuestas fueron presentadas por las intendencias de estos departamentos, en articulación con ministerios y otros organismos del Estado con representación en el interior del país, además de organizaciones de la sociedad civil. Desde marzo -fecha en que presentaron las iniciativas- hasta fines de junio se concretó una capacitación junto con la Escuela Nacional de Administración Pública (ENAP), para que esas iniciativas se transformaran en proyectos y quedara capacidad instalada en los departamentos para el diseño y gestión de proyectos de desarrollo territorial.
“En general hay una búsqueda de acercamiento del Estado al ciudadano y un fortalecimiento de los vínculos y las herramientas de comunicación, tanto de la intendencia como de los ministerios con esas poblaciones, en el entendido de que en una estrategia de fortalecimiento de los procesos de desarrollo territorial, el acceso a derechos pero también el fortalecimiento de las organizaciones locales del interior, es un paso esencial para el surgimiento de proyectos de desarrollo local”, argumentó Fagetti.

FINANCIAMIENTO
El financiamiento aportado por Uruguay Integra a cada proyecto es de unos ocho millones de pesos, que se complementan con contrapartes que otorgan tanto las intendencias como los socios ministeriales que pueden ir desde recursos técnicos y logística hasta equipamiento.
El sistema de apoyos implica una partida inicial en función a un cronograma de actividades que se le solicitó para el primer año. Deben presentar informes trimestrales, para que, luego de una evaluación se les otorguen las partidas subsiguientes, hasta el final del proceso que en total dura 18 meses. La Unión Europea aporta a nivel global 6.5 millones de euros y otro tanto el Gobierno uruguayo.

FASE ANTERIOR
Desde sus comienzos, Uruguay Integra apoyó a 20 proyectos de fondos de desarrollo territorial, sumado a otros 20 de un fondo de iniciativas municipales y nueve proyectos más, provenientes de la iniciativa “Cosas de Pueblo”. Además realizó numerosos estudios de base territorial que en la “fase dos” serán incluidos en el desarrollo de un “observatorio de políticas territoriales” que se enmarca dentro de las estrategias de la propia Área de Políticas Territoriales de OPP.