Cambios en el Gabinete: Daniel Olesker será el nuevo ministro de Desarrollo Social
El Presidente de la República anunció que la ministra de Desarrollo Social, Ana Vignoli será removida de su cargo. El actual ministro de Salud Pública asumirá la dirección del MIDES la próxima semana. La decisión fue tomada desde hace 20 días y cuenta con el apoyo del vicepresidente Danilo Astori. La titularidad del MSP será ofrecida al actual subsecretario de la cartera, Jorge Venegas.
Tras la reunión del Gabinete ministerial realizada en la Residencia de Suárez, el Presidente José Mujica aseguró que Ana Vignoli se mantendrá en el cargo hasta la semana próxima para que la transición sea gradual. El Presidente defendió la gestión de la actual titular del MIDES: “Le ha tocado bailar con la más fea, y ha puesto de su parte la mayor entrega y no tenemos reparos. Esta es un cuestión de estrategia que estaba trazada”, indicó.
En referencia a la designación de Olesker, el Presidente afirmó que se trata de una persona que se dedicó gran parte de su vida a los temas sociales. La dirección del Ministerio de Salud Pública será ofrecido a Julio Venegas, actual subsecretario de esa cartera. Mujica afirmó que las designaciones “son personales” y en este caso se trata de alguien capacitado para esa tarea.
El Presidente de la República adelantó que habrá otros cambios en su gabinete que serán anunciados luego de que hable con las personas involucradas.
Mujica aseguró que el país tuvo un período de crecimiento sistemático y anual, cercano al 8,5%, como el de 2010. La situación se refleja en los índices de ocupación, en el record de contribuyentes al Banco de Previsión Social (BPS), en el nivel de consumo de los uruguayos e incluso en la falta de gente para múltiples trabajos y oficios.
El Presidente dijo que el crecimiento también supone crisis, “como sucede con la infraestructura del país que no acompaña a ese crecimiento”, y también conlleva otras crisis, como la mejora en la equidad y el reparto.
En ese sentido, señaló que en 2004 Uruguay tenía el 40% de su población bajo la línea de pobreza, cifra que bajó al 18%. La indigencia superaba el 4% y hoy se encuentra en 1,7%. Ese porcentaje, aunque bajo, refleja el núcleo más duro de la indigencia y el más difícil de superar, indicó el mandatario.
La Rendición de Cuentas presentada al Parlamento indica que el Gobierno tiene como uno de sus principales propósitos fortalecer el conjunto de las políticas sociales ya implementadas. Se mantendrá un enfoque transversal e integrado de las políticas de educación, salud, seguridad social, alimentaria y habitacional. Los lineamientos apuntan a reducir la indigencia y la pobreza, como pilar fundamental para la construcción de una sociedad más equitativa, dijo.
Mujica explicó que la implementación de la red de protección social, junto con el crecimiento económico sostenido, está dando buenos resultados. Los indicadores de pobreza e indigencia reflejan la combinación del crecimiento económico y el rol protagónico de las políticas sociales.
En la Rendición de Cuentas se multiplicaron los recursos económicos del Ministerio de Desarrollo Social (MIDES), con el objetivo de brindarle un marco de acción más amplio. Mujica abogó por ajustar los gastos para tener una mayor eficiencia para el gasto social. “Si la economía no responde, no hay recursos para políticas sociales”, enfatizó.
En otro orden, Mujica exhortó a los integrantes del gobierno y de su fuerza política a hacer las cosas bien y a comprometerse con el país. “El patrimonio del Estado no es solo una cuestión jurídica, trabajar bien significa no robarle horas al esfuerzo al personal de confianza, significa no quedarse con el viático que uno gasta, significa poner el alma, la honradez y la sabiduría”, enfatizó el Presidente. Asimismo, pidió a la oposición buena fe en el compromiso.
Por su parte, el vicepresidente de la República, Danilo Astori destacó su apoyo total y su compromiso con el enfoque, visión y decisiones que comunicó el Presidente Mujica. Compartió el análisis de la transformación de la sociedad uruguaya así como las potencialidades a futuro que tiene el país. Reconoció que Uruguay está muy cerca de alcanzar niveles altos de desarrollo económico y social, pero “depende del esfuerzo de todos los uruguayos alcanzarlo”.