Fiscalía de Rivera de 1º Turno formalizó a una mujer por tentativa de homicidio

La Fiscalía Letrada Departamental de Rivera de 1º Turno, a cargo de la fiscal Tania Vidal, solicitó la formalización de la investigación respecto de una mujer por un delito de homicidio especialmente agravado por la premeditación, en grado de tentativa. Asimismo, Vidal pidió, como medida cautelar, la prisión preventiva de la imputada por el término de 120 días.
En el pedido de formalización, presentado ante la Sra. Juez Letrado de Primera Instancia de Rivera de 7º Turno, se narran los siguientes hechos: La imputada M.G.L.P., oriental, soltera, de 50 años, domiciliada en Montevideo, mantenía desde hace aproximadamente un año una relación afectiva con la víctima J.M.L., de 17 años de edad. Si bien la imputada reside en la ciudad de Montevideo, mantenía contacto telefónico diario con el adolescente y viajaba varias veces al año a Tranqueras para visitar amigos y propiciar los encuentros con la víctima.
El pasado viernes 9 de noviembre llegó a Tranqueras en un auto de alquiler y se hospedó en una posada en Valle del Lunarejo, lugar donde presta servicios el adolescente. A partir de su llegada, la imputada pasó todas las noches con el adolescente, en el auto que rentó, a orillas del arroyo Pintado retornando a la posada al amanecer.
La noche del sábado 17 de noviembre de 2018, próximo a la hora 20:00, G.L. pasó a buscar a la víctima por su domicilio y se dirigieron a cenar a la ciudad de Tranqueras y luego se dirigieron al paraje rural La Palma y se estacionaron a orillas del arroyo, permaneciendo dentro del vehículo.
La madrugada del domingo 18 de noviembre, luego de mantener relaciones sexuales, y por motivos que se desconocen, la imputada asestó a la víctima un corte y dos puntazos en la zona del cuello, pectoral izquierdo y brazo izquierdo, mediante el empleo de un cuchillo de 12,5 centímetros de hoja que llevaba en el portaobjetos de la puerta del conductor del auto, lugar donde ella se encontraba.
Una vez herido, el adolescente salió desnudo del auto y caminó unos metros por el campo, perdiendo gran cantidad de sangre por la zona de la tráquea, al tiempo que decía “¿qué me hiciste?”, según dichos de la propia imputada. En ese momento, esta salió a socorrerlo y, luego de vestirlo y envolverle la herida del cuello con una frazada que llevaban en el vehículo, lo llevó hasta la policlínica de Tranqueras para que le prestaran asistencia.
Una vez que dejó a la víctima en la policlínica, la imputada condujo hasta la posada donde se hospedaba, arrojando por el camino y desde la ventanilla del auto, el cuchillo con el que había herido a la víctima. Al llegar a la casa de sus amigos, la imputada, entre llantos, les manifestó que un desconocido había atacado al joven y se había dado a la fuga.
El adolescente, por su parte, y producto de las heridas, debió ser trasladado a la ciudad de Rivera, donde fue internado en CTI de Sanatorio CASMER, permaneciendo hasta el momento en estado reservado, según expresó el médico forense y da cuenta el último parte médico emitido en horas de la tarde del día de hoy.
Por otra parte, relevados los mensajes intercambiados entre la víctima y la imputada, dan cuenta de que en la jornada previa a la agresión, ésta insistentemente pretendió encontrarse con el adolescente, frente a la negativa, expresada en más de diez oportunidades por parte del mismo a concretar dicho encuentro.
Los mensajes evidencian asimismo, que existió entre ambos un incidente donde ella presentó agresividad. Es de destacar que el celular del adolescente no fue habido, sin perjuicio de que surge de la carpeta investigativa que al momento de que la imputada lo recogió en auto por su domicilio, este lo llevaba consigo.
Interrogada en sede de Fiscalía, en presencia de su defensa, acerca del cuchillo con el que agredió a la víctima, la imputada expresó que el mismo lo portaba en sus botas cuando venía a Rivera, no obstante, no pudo dar una explicación lógica al motivo por el cual lo tenía la noche de los hechos, en el portaobjetos de la puerta del conductor del auto que rentó, esto es, a centímetros de sus manos al momento de la agresión.
La pericia médico forense de la víctima da cuenta de que la misma presenta: “Herida cortante profunda lateralizada a izquierda en cara anterior de cuello. Lesionando paquete vascular anterior al cuello y herida en espiral de tráquea (de cara anterior a posterior) cervical. Herida cortante extensa en brazo izquierdo de tipo escalpe de 14 centímetros. Herida punzo cortante suturada en pectoral mayor izquierdo, excoriación lineal en cara anterior del hemitórax derecho, perpendicular al eje mayor y otra paralela a línea medio clavicular”.
Se consigna que la víctima tiene peligro de vida, y permanece internada en CTI con pronóstico reservado. Interrogado, el perito médico forense expresó en forma gráfica que si la víctima hubiera perdido su vida en la agresión, el diagnóstico sería “degollamiento”. Expresó asimismo que las lesiones son profundas y graves, por lo que descarta la posibilidad de que sean causadas por un impulso de la víctima sobre el cuchillo, como expresó la imputada en sede de fiscalía y en presencia de su defensa. Por su parte, periciada por médico forense en el día de ayer, la imputada no presentó lesiones en rostro ni cuello.
Asimismo, sometida la imputada a pericia psiquiátrica, la perito concluye: “periciada sin antecedentes de enfermedad mental, que cursa relaciones conflictivas con su concubino con el que vive y dice no ser pareja de este, además de conceptos ambivalentes expresados ut supra, que mantiene vínculo con una persona de diecisiete años actualmente, que minimiza diciendo que desconocía la edad y que hace horas agredió en forma violenta, realizó actos que luego corrigió (arma, discusión por celular), omitió detalles que solo confrontándola con ellos, dio explicación precisa. No presenta angustia ni expresa pena por la situación de la pareja que agredió, no realiza auto-crítica y reverbera en la agresividad del joven tomando distancia de su propia agresividad. Tiene una tendencia mayor que la media a realizar actos violentos”.
Por su parte, la perito psicóloga de la Sede, luego de entrevistar a la imputada, concluyó: “En el plano de lo psicológico, en este momento la periciada evidencia angustia expresada en llanto relacionada a su situación actual, con tendencia a victimizarse, sin autocrítica y sin afecto acorde y sostenido a lo largo de la entrevista, siendo su discurso banal por momentos, con relatos de cosas que no guardan relación con los hechos, evitando focalizar en preguntas que se le hacían o aclaraciones que se le pedían. (…) De la instancia se desprende que si bien en ocasiones sintió miedo, este sentimiento no era permanente, así como no considera y no se sentía víctima de violencia o amenazas”.
Con respecto al cuchillo utilizado en la agresión, fue la misma imputada quien condujo a la policía al lugar donde lo había arrojado, por lo que pudo ser recuperado.