Una sorpresiva visita que fue bienvenida entre los aurinegros
Sorpresivamente nos encontramos en el Estadio Municipal “Atilio Paiva Olivera” con uno de los mejores jugadores que vimos jugar a lo largo de todos estos años que estamos en el fútbol.
Un puntero que llegó a nuestra ciudad de la mano de Don Pedro Maciel, y que fue -sin duda alguna- el mejor puntero derecho que vimos.
El tacuaremboense Rogelio Rivero llegó al fútbol local y se adueñó de la camiseta número siete de los aurinegros y por varios años, coincidentemente, con los mejores años de Peñarol en el fútbol local.
Con el “Boca” Rodríguez como nueve y Miguel Ángel Correa en la extrema izquierda, marcaron una época entre los mirasoles y también con la camiseta celeste.
Una trilogía de ataque realmente sensacional y seguramente no había otra igual en todo el interior uruguayo, tanto que fueron campeones del interior con la camiseta albiceleste (a bastones verticales celestes y blancos), que fue la que utilizó Rivera en esa temporada.
Ahora aquí estaba Rogelio, junto a nosotros, y rápidamente comenzamos a recorrer algunas de sus anécdotas en la cancha y fuera de ella.
Nos contó que Juan Eduardo da Cunha lo había invitado para estar presentes en el comienzo del Campeonato Rivera y que siempre que lo invitan viene.
Pocos minutos después comenzaba el partido y Rogelio estaba allí en la tribuna, junto a Miguel Ángel, como en los viejos tiempos, y ambos con estupendo estado físico, como para entrar a la cancha y seguir de largo, uno por la derecha y el otro por la zurda.
Como si ello fuera poco para custodiar a Juan Eduardo da Cunha, allí estaba Guey Coelho, un aurinegro de ley que se había alejado del fútbol pero que, poco a poco lo vemos más seguido en el estadio y siempre recordamos que está en la terna que habilitó el conjunto de Peñarol como delegados ante la Liga Departamental de Fútbol de Rivera.