Sub-15: Los datos estadísticos de Oriental y la opinión del director técnico del campeón

Los azules se consagraron campeones de la categoría sub-15. Un título merecido por lo realizado por Oriental desde el comienzo mismo del certamen juvenil.
Es más, es necesario ir al fondo para encontrar el trabajo del fútbol infantil para justificar plenamente la obtención del título.
Al plantel que se inició hace muchos años hubo algunos jugadores que se agregaron y que dieron un aporte muy importante, hizo que el azul fuera un equipo al que había que mirarlo con mucha atención desde el comienzo mismo de la actividad.
Tuvo en Huracán un rival que lo complicó en todo momento porque en la primera rueda fue victoria de los azules pero luego el “globito” le ganó dos partidos, el de la Liguilla y la final de la Liguilla.
Pero el azul supo sobreponerse a esta situación y ganar el partido más importante, la final del certamen y lo hizo con autoridad, por tres a uno como para no dejar ninguna sombra de dudas.
Luego el pitazo final del partido, el paso al festejo de un lado el llanto desconsolado del otro pero todo dentro de una normalidad que tuvo su clímax cuando Lucas Autedo encabezó el grupo de jugadores de Huracán que cruzaron la cancha para saludar a los campeones.
Fue un momento emocionante y, para quienes entendemos al fútbol solamente de esta manera, fue lo mejor que vimos en la tarde.
Luego la entrega de los trofeos y cada cual dieron rienda suelta a la alegría de un lado y la tristeza por haber perdido una final, del otro.
Un gran espectáculo que terminó como deberían finalizar todos los partidos, especialmente en juveniles, donde un equipo demostró superioridad a lo largo de todo el certamen y el otro fue un digno rival en todo momento y terminó llevándose no solo el trofeo de vice campeón sino que, en esa edad, el más importante, el de la corrección deportiva.

UN LARGO PROCESO INICIADO EN EL BABY FÚTBOL
LLEVÓ AL TRIUNFO DE LA CATEGORÍA SUB-15 AZUL

Como lo señalado, Oriental fue el campeón del primer certamen del año. Desde el comienzo mismo del campeonato hubo la clara sensación que los azules eran candidatos muy firmes a la obtención del título.
Un equipo bien integrado, un plantel consistente y los resultados fueron avalando la predicción.
Queda la clara sensación que confirma nuestra opinión respecto al trabajo del fútbol infantil y este equipo azul tuvo una muy buena base y la enorme mayoría de los integrantes de este grupo provenían del trabajo de técnicos que iniciaron su trabajo mucho antes que lo tomara Oscar de León para concretar este anhelo azul.
Oriental termina con 43 goles a favor y apenas diez goles en contra siendo la valla menos vencida del campeonato, en un arco donde se alternaron los dos goleros que jugaron prácticamente la misma cantidad de partidos uno y otro.
Enzo Soares de Lima y Braian da Costa fueron los dueños del candado azul.

LOS DATOS ESTADÍSTICOS
El trayecto comenzó el 4 de marzo cuando Oriental derrotó a Peñarol por cuatro goles a uno en partido jugado en el Parque “Pedro Maciel” con el arbitraje de Sandro Luis Ferreira.
La segunda fecha se jugó el 10 de marzo y fue goleada azul ante Bola Ocho por seis goles a cero.
El encuentro se jugó en el Complejo Deportivo “Bernardino Freitas” arbitrado por Wilmer Rodríguez.
La tercera fecha, jugada el 18 de marzo en la cancha de Cuñapirú, fue victoria de los azules, tres a cero a Huracán. El árbitro del encuentro fue Shuber López.
La cuarta fecha, el 28 de marzo, nueva victoria de Oriental, en esta oportunidad ante Cuñapirú por dos a uno. Se jugó en la cancha de Peñarol siendo el árbitro, Anderson González.
La quinta fecha, el 1 de abril, victoria ante Nacional por tres a cero. Se jugó en el Parque “Pedro Estévez” siendo el árbitro Julio César Rivero.
La sexta fecha, el 8 de abril, por primera vez como locatarios en el Parque “Alberto y Elías Bouchacourt”, y derrotando a Lavalleja por siete goles a dos. El juez del partido fue Sandro Luis Ferreira.
La primera rueda finalizó el 15 de abril cuando se venció a Sarandí Universitario por tres a cero. Se jugó en el Complejo Deportivo “Bernardino Freitas” y el árbitro fue Silvio Gabriel Antúnez.
La primera rueda terminó con la obtención del título por parte del azul, siete partidos jugados, siete ganados y 28 goles a favor y tan solo cuatro en contra.
En cuatro partidos el azul terminó con el arco en cero y tan solo Lavalleja le convirtió dos goles, los otros dos fueron de Peñarol y Cuñapirú.
Otro dato interesante es la capacidad goleadora, oriental siempre hizo más de un gol.
Cuando hizo menos fue ante Cuñapirú que marcó dos, le hizo tres a Huracán, Nacional y Sarandí Universitario.
Le hizo cuatro a Peñarol, seis a Bola Ocho y siete a Lavalleja.

LA LIGUILLA
Como campeón de la primera rueda, los azules ingresaron a la Liguilla. La primera fecha se jugó el 22 de abril y los azules reiteraron resultado ante Cuñapirú, nuevamente dos a uno en partido jugado en el Complejo Deportivo “Bernardino Freitas” con el arbitraje de Wilmer Rodríguez.
Recién en la segunda fecha se pierde el invicto y es ante Huracán, el 13 de mayo en partido jugado en el Parque “Pedro Maciel” con el referato de Néstor Fabián Coelho. Los del “globito” lo ganaron por uno a cero.
La tercera fecha que se jugó el 20 de mayo, el azul vuelve a la victoria y nuevamente goleada, en esta oportunidad ante Peñarol. Seis a uno fue el resultado en partido jugado en su propio campo de deportes arbitrando Silvio Gabriel Antúnez.
La cuarta fecha marcó una nueva victoria del campeón y fue ante Lavalleja por tres a uno el 27 de mayo en el Parque “Alberto y Elías Bouchacourt”. Néstor Fabián Coelho fue el juez del partido.
Y en la última fecha, la segunda y última derrota y nuevamente ante Huracán el 10 de junio. Se jugó en la cancha de Oriental arbitrando Anderson González.
Quedaba claro que el único rival que tenían los azules eran los del “globito”, que finalmente se consagraron campeones de la Liguilla.
De acuerdo al reglamento jugaron un partido final, disputado el 17 de junio en el Parque “Pedro Maciel”. Fue victoria de Oriental por tres a uno en partido arbitrado por Julio C. Rivero.
Resumiendo, el campeón hizo 43 goles en total con un excelente promedio, salvo un solo encuentro, en todos los demás hizo goles. Sufrió diez goles en su valla y fue la menos vencida del certamen.
Jugó cuatro de los trece partidos que disputó, en sui propia cancha. También cuatro veces jugó en el Parque “Pedro Maciel”, incluso la final.
En Sarandí Universitario, en tres oportunidades y una en cada una de Lavalleja y Cuñapirú.

ARBITRAJES
Julio C. Rivero, Sandro L. Ferreira, Néstor F. Coelho, Silvio Antúnez Anderson González, y Wilmer Rodríguez le arbitraron en dos oportunidades cada uno de ellos.
El restante encuentro fue arbitrado por Shuber López.

GOLEADORES
Los 43 goles del equipo azul fueron conquistados por Anthony Scirgalea en nueve oportunidades. Siete goles hizo Leviston Ribeiro. Seis goles para Gonzalo Lima y Juan Mayker Escobar.
Con cuatro: Marcelo Leal. Dos goles hicieron Kevin Dominc Vargas, Maikol Maciel, y Santiago López. Un gol para cada uno de los jugadores José Ramiro Blanchet, Lucas Magdaleno, Gian Lucas Fernández, Kleber Paz y Santiago Certorio.

EL PLANTEL DEL AZUL
Oriental necesitó el aporte de veinticinco jugadores para lograr el título.
Ellos son: Enzo Francisco Soares de Lima, José Ramiro Blanchet Gariffo, Bernardo Claudio Vega, Maximiliano Escobar, Gonzalo Gabriel Lima, Kevin Dominic Vargas, Anthony Miguel Scirgalea Mello, Leviston Ribeiro, Santiago Certorio, Marcelo Rafael Leal, Santiago López, Kleber Samuel Paz, Maikol Maciel, Emanuel Pérez, Braian da Costa Castillo, Luis de la Vega, Ignacio Cal, Alexis Suárez, Agustín Pinto, Ignacio Barboza, Lucas Magdaleno, Gean Lucas Fernández. Diego Castro y Alexis Sena.

LA OPINIÓN DEL TÉCNICO

Oscar de León encabezó el cuerpo técnico que tuvo a varios colaboradores, entre ellos, Alberto de los Santos, que siempre estuvo, Yian Luca Rosa como entrenador de goleros, Arturo Pereira, al lado del grupo, Juan Ary Beledo como equipier y varios se alternaron como delegados de la institución en los partidos jugadores.
Oscar de León hizo un análisis acerca del logro que alcanzó el grupo señalando: “Te podría decir que esto comienza hace tres años cuando me hago cargo de esta generación con el cambio de ellos del fútbol 7, al fútbol en cancha grande. Y te cuento que no fue fácil inculcar la idea, de que no se le quite el placer y la posibilidad de jugar. Hubo mucha resistencia por algunos padres y jugadores que decían que no sirve de nada jugar bien si no se gana. Como si yo quisiera jugar bien prescindiendo del resultado. Como si fueran cosas opuestas. Estoy convencido que jugando bien se está más cerca de conseguir los resultados, aunque como esto es un juego nadie tiene la receta, se puede ganar de cualquier manera y todas son válidas”.
La importancia del fútbol infantil va mucho más allá de los resultados y el técnico cuenta una anécdota en relación a estos mismos chicos cuando aún jugaban a nivel de ONFI.
“Estaba en la entrega de premios del fútbol infantil en el año 2016 y el ‘enano’ Santiago Certorio me dijo: ‘Oscar vos hablas de jugar prolijo, con pelota al piso, de pases cortos, que cuidemos la pelota y no la dividas… pero fíjate la entrega de premios, no ganamos nada’. Y le dije: ‘A esta edad tú y tus compañeros no están en condiciones de ganar porque los demás en esta etapa te sacan ventajas por el tamaño, pero esperá, calma, cuando te desarrolles y tengas un físico competitivo y crezcas un poco más el jugador grande no va a poder con tu talento y estoy seguro que le vas a ganar’.
El año pasado no pudo disfrutar del logro de la categoría sub-15 porque estaba en Maldonado, este año vino y le ganó a la supremacía física y para mi gusto fue uno de los mejores jugadores de la temporada y sin dudas de la final. Este año cuando vino ya era más fácil convencerlo porque llegaba a un equipo que había ganado sin traicionar el estilo que queríamos imponer.
Tenía que nombrar lo anterior para intentar explicar lo acontecido este año, desde el comienzo mismo cuando comenzamos la pretemporada en la Brigada.
Al plantel consolidado del año anterior con algunos referentes como Ramiro Blanchet y Gonzalo Lima, se incorporaban algunas figuras muy trascendente entre ellos Bernardo Vega un botija de Tranqueras que le aportó mucha tranquilidad y clase en el fondo y todo el talento de Mayker ‘Kake’ Escobar con quien tuve una conversación el primer día para explicarle lo que me había sucedido cuando lo había enfrentado cuando jugaba en Frontera, para intentar convencerlo que donde mejor podía rendir era de volante central, y lo entendió desde el comienzo, se convenció y fue una figura determinante en el funcionamiento colectivo del equipo y en el desarrollo del campeonato.
En esa pretemporada ya tuve la certeza que el equipo estaba para grandes cosas porque hacia lo que le pedíamos, comprendían y entendían el juego, los jugadores podían explicar cómo jugaban, porque lo hacían de este modo, que razones había detrás de cada movimiento y de cada elección, entonces me daba la absoluta tranquilidad que íbamos por buen camino.
Los nuevos entendieron rápido que aquí había que jugar como corresponde y creo que ese fue el factor diferencial, entender el porqué de las cosas y los movimientos que les permita elegir la mejor decisión en cada momento”.
Fortalezas y debilidades: “Creo que el proceso de tres años respaldado por los logros deportivos anteriores ha sido la principal fortaleza. El convencimiento de que ese estilo y ese camino nos podían acercar al objetivo de lograr el título.
Las debilidades sin dudas aparecieron en los enfrentamientos directos con Huracán por la enorme diferencia física de algunos de los jugadores rivales. Un equipo que hacia valer esas cualidades, muchas veces entrabamos en una confusión y el rival nos llevaba a ese juego de pelota dividida que no nos convenía, un equipo con mucha lucha en el medio, con pierna fuerte, con mucho carácter, un equipo muy bien dirigido que intentaban ganar un mínimo espacio para meter un pelotazo largo buscando una segunda pelota con jugadores muy veloces”.
La final: “En el entretiempo del partido recuerdo que les dije que ‘por primera vez no tengo nada que decirles, han jugado un primer tiempo excepcional, con un amor propio increíble, con un juego del cual estoy orgulloso, seguro que si siguen así, que no lo dudo, al final no queda otra que levantar la copa, no lo duden, solo tienen que salir con la misma disposición’… Ahí ya supe que serían campeones, aunque te lo digo una vez más… esto es fútbol y no siempre gana el mejor.
Lo que me queda como estadística es que la sub-15 del año 2016 que perdimos la final con Peñarol fue el equipo más goleador, el año pasado volvimos a repetir siendo el equipo con más goles a favor y este año no saqué la cuenta, fuimos el equipo más goleador con un promedio de casi 4 goles por partido.
Fíjate que a los rivales de la liguilla le hicimos en dos partidos, a Lavalleja diez goles, a Sarandí diez goles, a Peñarol diez goles y a Huracán siete goles… Además de ser la defensa menos vencida”.