La selección sub-17 logró tres puntos con esfuerzo y el valor que tiene la pelota quieta

Los celestes juveniles ganaron un partido complicado porque, si bien es cierto estimamos que se trata de un resultado ajustado a la realidad de lo que se vio en el campo de juego a lo largo de los noventa minutos, no podemos olvidar que la celeste pasó momentos complicados, luego de haber anotado el gol.
El partido comenzó con el equipo celeste buscando evitar que los rivales pasaran la mitad de la cancha y jugaran en nuestro campo.
La idea era recuperar la pelota lo antes posible y volver a la zona ofensiva teniendo a Joaquín Paines a un valor fundamental en la recuperación contando con el apoyo permanente de Junior López y Luis Miguel Pereira que ganaban generalmente en esa función.
Sin embargo, el primer tiempo se terminó sin goles, allí los celestes hubieran merecido otro resultado.
Pero en el comienzo del complemento tuvo una jugada que resultó vital para el partido y para los nuestros. Jugada de pelota quieta, un tiro libre a favor y la capacidad de los jugadores tratando de recrear, en la cancha y en un partido oficial, todo aquello que se entrena durante la semana.
Una y mil veces se entrena una jugada que nació en la mente del técnico y que en muchas oportunidades no hay chances de realizarla en el partido y generalmente no sale como se entrena porque la situación es diferente, especialmente desde el punto de vista sicológico o de situación de juego.
Pero allí estaban Joaquín Sánchez y Luis Miguel Pereira, dos jugadores muy importantes desde el punto de vista técnico y la jugada salió exactamente a lo que se entrenó. La pelota, con un remate impresionante de Luis Miguel Pereira, terminó en el fondo de la red.

El esfuerzo, el trabajo y el premio merecido. Pero después llegaron momentos complicados para la celeste. Hubo errores defensivos inexplicables y el gol de la visita estuvo muy cerca.
Llega una jugada capital que fue reclamada por toda la representación rojiblanca, especialmente los que estaban afuera y fue una falta del golero celeste que debió salir afuera del área a cortar y comete una falta que mereció la tarjeta amarilla.
Los tacuaremboenses pedían la roja, pero, en realidad, la pelota no iba camino al arco, sino que iba a cruzar paralelamente al arco y esa fue la razón por la cual el árbitro estuvo bien en mostrar el cartón amarillo y no en la expulsión.
Rivera tardó unos minutos en volver a tomar el mando en la cancha y lo logra con los cambios y con el trabajo del medio y del ataque a la par que los defensas volvieron a afirmarse y a rendir de acuerdo a sus antecedentes y a lo que venían haciendo en este mismo partido.
El valor de la pelota quieta para lograr los tres puntos en el partido.

LOS DETALLES

RIVERA 1 TACUAREMBÓ 0
Cancha: Estadio “Atilio Paiva Olivera”. Hora de comienzo: 21:00. Jueces: Néstor David Silveira, Mauro Antonio Melo y Daniel Enrico Cantos (terna de Artigas).
RIVERA: Anthony Juncal, Mauricio Escobar, Felipe Cuadro, Facundo Daniel Olivera, Alex Damián Coitiño, Luis Miguel Pereira, Joaquín Sánchez, Wilson Leonardo Ferreira, Gabriel Agustín Madruga, Joaquín Luis Paines y Junior Agustín López.
Cambios: Alcides Damián Varela por Wilson L. Ferreira; Felipe Machado por Alex D. Coitiño; Emanuel Mezquita por Joaquín L. Paines; Ángel Abraham Silveira por Junior López; Enzo Fernando Cal por Gabriel Madruga.
Gol: Luis Miguel Pereira al 1’ del segundo tiempo.
TACUAREMBÓ: Ronald Miguel Casuariaga, Juan Ignacio Pedrozo, Leandro Nahuel Pérez, Ignacio Cortez, Ángel Ariel Hernández, Lucas Lautaro Pereira, Luis Enrique Buslón, Valentín González, Brandon Sebastián Pires, Mateo Sánchez y Kevin Nicolás Lima.
Cambios: John Anderson Sánchez por Lucas Pereira; Wilder Emanuel Leal por Ángel Hernández; Renzo Mathías Palacios por Juan Pedrozo; José Diego Alvez por Kevin Lima; Mario Joaquín Nieves por Leandro Pérez.