El deporte en mini noticias

– En realidad nadie podía suponer que en la jornada de ayer se iba a poder jugar al fútbol.
– Los anuncios meteorológicos anunciaban lluvias muy fuertes para nuestro país.
– Incluso hubo alertas que cambiaban entre amarillo y naranja y en todos los casos se incluía a nuestro departamento.
– Ya en la mañana dominical, cuando comenzaban los partidos de juveniles se podía advertir un tiempo pesado y el calor comenzaba a hacer sus estragos en los físicos de los jugadores.
– Pero había la casi certeza que los partidos de la categoría sub-15 se iban a poder jugar sin mayores inconvenientes y así fue.
– Teníamos entonces los de la Divisional B y el calor aumentaba y el viento también.
– Lo tormenta estaba aquí, encima de nuestras cabezas pero todo comenzó con relativa tranquilidad.
– Salvo el fortísimo viento y el exagerado calor el primer partido transcurrió con normalidad.
– Ya en el segundo todo fue diferente porque hubo un chaparrón en medio que llamó la atención.
– Luego reinó la tranquilidad porque ya no hacia tanto calor y porque no llovía pero se sabía que el tiempo no se iba a aguantar así hasta el tercer encuentro de la tarde.
– Empezó bien, sin problemas aunque el cielo comenzó a quedar de un color amenazante y a pocos minutos del final del primer tiempo se desató la lluvia.
– Y fue fuerte por espacio de unos diez minutos, luego cesó y cuando los jueces ingresaron a la cancha las marcas del campo de juego habían desaparecido.
– Juan Sosa, el canchero de Peñarol ingresó a marcar las áreas y la línea de meta con tanta mala suerte que cuando estaba por terminar su trabajo se vino otro chaparrón y así comenzó el segundo tiempo.
– Lo gracioso de todo esto es que el partido terminó con un sol resplandeciente, arco iris, y algo de lluvia.
– Lo concreto es que se pudo jugar tanto la fecha de juveniles como de la Divisional B.