Dos empates electrizantes que llegaron en los instantes finales de los partidos

El viento fue el principal protagonista de la noche de fútbol en el Estadio Atilio Paiva Olivera. Pero, a decir verdad, ninguno de los equipos supo aprovechar de la mejor manera la intensidad del viento que soplaba de sur a norte y, es más, los goles más importantes de la noche se hicieron contra ese fenómeno de la naturaleza.

PUDO GOLEAR PEÑAROL
Peñarol jugó ante Huracán un partido muy difícil de explicar para quienes no estuvieron presentes en el estadio.
El dominio aurinegro fue importante a lo largo de los noventa minutos, en especial en los primeros cuarenta y cinco, donde hizo dos goles y pudo haber concretado dos o tres más.
Cuando se fueron al vestuario Peñarol volvería a la cancha con viento a favor y todos suponían que podían seguir acumulando goles.
Pero Huracán es un equipo difícil de ganarle, lucha cada balón como si fuera la final de un campeonato, pelea cada una de las pelotas y nunca da ninguna por perdida.
A pesar de las bondades del “globito” fue Peñarol quien contó con más posibilidades de aumentar la diferencia y no lo consiguió.
Huracán descontó y hasta hubo una pelota que anduvo recorriendo la línea de gol cuando muchos, mejor ubicados que nosotros a nivel de cancha, aseguraban que esa pelota había ingresado.
Llegaban los minutos finales y Peñarol no podía cerrar el partido con otro gol, quedando a expensas de una situación que determinara un nuevo gol de Huracán.
Y así fue, una pelota que va a restar el golero aurinegro, le rebota a Juan Vidarte y se fue lentamente al arco para transformarse en el empate muy festejado por Huracán.

QUINCE MINUTOS FINALES
El partido de fondo entre Cuñapirú y Lavalleja se puede resumir en intentar contar lo que sucedió en los quince minutos finales. Los otros setenta y cinco minutos, mejor olvidarlos.
El viento, el frío y la posibilidad de agua que era inminente pero que no se concretó, se adueñaron de una noche que no mostraba fútbol agradable ni de un lado ni del otro.
Sin embargo, toda la atracción del encuentro estaba en el final y las emociones también. Un tiro libre perfecto ejecutado por Martín Núñez de Moraes que la clavó en el ángulo de Diego Basso y Cuñapirú le estaba quintando el invicto a Lavalleja.
El decano hizo todo lo posible por llegar al gol del empate y no podía, porque además de la desesperación de los errores en las jugadas ofensivas, el reloj avanzaba tan rápido como no lo había hecho en los primeros setenta y cinco minutos.
Pero el fútbol depara sorpresas y muchas de ellas ni siquiera pueden estar enumeradas en un análisis del mejor deporte desde ese punto de vista.
Se jugaba ya el tiempo adicionado y Cuñapirú ganaba sin mayores sobresaltos. Una pelota enviada al área del tricolor y se fue afuera en momentos que el delantero se lleva por delante a Sergio Albano.
El golero tuvo todo en sus manos para tirarse al piso, dejar pasar algunos segundos y enfriar totalmente el partido para que el árbitro lo terminara. No fue así, Sergio Albano agredió al rival y el árbitro determinó la expulsión.
Luciano Pérez al arco y Lavalleja se decidió a buscar, en los segundos que restaban, lo que no había hecho en todo el partido y finalmente, a los casi cincuenta minutos, un golazo de Luis Eduardo Ponce de León dejaba todo igualado, Lavalleja salvaba su honor manteniendo el invicto y Cuñapirú se iba masticando bronca.

RESULTADOS DE LA FECHA

• Complemento de la primera fecha (atrasada) del Campeonato Rivera de Primera División.
Peñarol 2 Huracán 2. Goles: Pablo Farías, Víctor Ferreira (P) / Luis Márquez, Juan A. Vidarte (H).
Cuñapirú 1 Lavalleja 1. Goles: Martín Núñez de Moraes (C) / Luis Eduardo Ponce de León (L).

TABLA DE POSICIONES