A Wanderers le costó muchísimo más de lo que suponía y ganó con lo justo
Fue un partido parejo donde no hubo superioridad ni de un lado ni del otro. Wanderers era el gran favorito luego del empate en Rivera. Sus parciales esperaban una fácil victoria y la única chance del decano riverense pasaba por la vergüenza deportiva que pudieran demostrar sus jugadores en la cancha.
A los trece minutos de juego llega el primer gol del partido y lo hizo el local. Todo quedaba mucho más fácil, ya ganaban y se encaminaba la clasificación.
Pero a los 23 minutos, cuando Lavalleja ya había hecho méritos suficientes para llegar al empate, viene el penal correctamente sancionado por el árbitro sanducero y que Michael Ribeiro transforma en gol.
Fue un penal que generalmente no se cobra, y menos contra el local, pero Jacinto Rivero no hizo otra cosa que cumplir con el reglamento.
Así se terminó el primer tiempo y Lavalleja tuvo posibilidades de haberse retirado con una victoria parcial pero el empate a un gol no era un mal resultado.
Sin embargo desde el comienzo del complemento, el asedio del Wanderers fue creciendo poco a poco hasta que hubo tres remates que se estrellaron en los postes del arco de Lavalleja y a partir de allí comenzó el nerviosismo del local.
Lavalleja, por el contrario, con una defensa bien armada, con buenas atajadas de Juan Marcelo González y un medio que marcó mucho más que lo que pudo apoyar a sus delanteros, se iba afirmando en un empate que parecía inamovible.
En el medio comenzó a ganar Lavalleja, con una brillante marca de Marcelo López y Fabricio Ferreira, que fueron cerrando los caminos y los nervios comenzaron a adueñarse del local hasta que el técnico decide la colocación de Horacio Peralta en la cancha.
El tiempo pasaba y, cada vez más, se afirmaba la posibilidad de llegar a la definición por penales porque el empate parecía que no iba a cambiar.
Y cuando restaban apenas siete minutos para el final y luego de una brillante atajada de Juan Marcelo González, la pelota rebota en la pierna del lateral Mauro Silva y se transforma en un autogol. Precisamente lo que necesitaba el Wanderers y que no acertaba los caminos para lograrlo.
Transcurría el minuto 38 del segundo tiempo y a partir de allí el partido estuvo paralizado durante dieciséis minutos.
Los parciales locales cometieron un error muy grave: arrojaron petardos, piedras y botellas al banco de suplentes de Lavalleja.
Desde afuera de la cancha, donde estaba sancionado el técnico de Lavalleja, llegó la orden de abandonar el campo de juego.
El capitán reunió a los jugadores en el centro del campo de juego y estos resolvieron continuar el partido.
Los árbitros expresaron desconocer si hubo petardos, piedras y botellas y solamente solicitaron que los bancos de suplentes cambiaran su posición, lo que debió haberse hecho antes del comienzo del partido.
Pasividad total de la policía, interferencia de los veedores del encuentro que influyeron en los árbitros para que continuaran el partido.
Tanto el veedor administrativo, que no fue el que estaba designado por OFI, como el técnico, ambos artiguenses, debieron haber permanecido al margen pero intentaron que los árbitros volvieran a la cancha.
Y en los minutos finales Lavalleja acorraló al Wanderers, aún con uno menos por la expulsión de Mauro Silva. Se jugó en las cercanías del área del local y Lavalleja estuvo a punto de haber logrado el gol de la clasificación cuando la pelota se fue apenas por encima del horizontal con el golero ya vencido.
Al término el encuentro y ya en el vestuario, siguieron las presiones y el árbitro anunció que enviará una ampliación del informe donde, según él, relatará todo lo sucedido y esperemos que no omita nada. Ni siquiera lo sucedido en el entretiempo cuando el delegado del Wanderers ingresó, a los gritos, al vestuario, a pagarles cuando debió haberlo hecho el veedor.
LOS DETALLES
WANDERERS 2 LAVALLEJA 1
Cancha: Estadio “Matías González”. Hora de comienzo: 15:30. Público: 300 personas. Jueces: Jacinto Rivero, Charles Barreto y Esteban Vignoli (terna de Paysandú).
WANDERERS (Artigas): Fabiano Mazzini, Juaquin Burutarán, Hugo Paz, Gerardo Monges, Aníbal Ledesma, Miguel Márquez, Rodrigo Alvez, Germán Díaz, Rodrigo Romero, Luis Martínez y Cristian Fagúndez.
Cambios: Horacio Peralta por Cristian Fagúndez; Pablo García da Rosa por Luis Martínez.
Goles: Luis Martínez a los 13’ del primer tiempo y Mauro Silva -en contra- a los 38’ del segundo tiempo.
LAVALLEJA (Rivera): Juan Marcelo González, Álvaro Reyes, Rafael Borges, Walter Fabián Pereira, Mauro Silva, Marcelo López, Cristian Fabricio Ferreira, Robert M. López, Petter Gonzalo Rocha, Michael Ribeiro y Robson Guzmao.
Cambios: Jonathan Fontoura por Petter Gonzalo Rocha; Hilton Mazoni por Robson Guzmao; Luis Eduardo Ponce de León por Robert López.
Gol: Michael Ribeiro -de penal- a los 23’ del primer tiempo.
Observaciones: A los 38’ del segundo tiempo, luego del segundo gol de Wanderers, parciales de la institución locataria arrojaron petardos, piedras y botellas a la cancha, por lo que el partido estuvo paralizado durante dieciséis minutos.
Luego el árbitro dispuso el cambio del banco de suplentes, pasando los del cuerpo técnico local al lugar de la visita y viceversa y el partido continuó a pesar que en reiteradas oportunidades Lavalleja estuvo a punto de retirarse del campo de juego por falta de garantías.
A los 42’ del segundo tiempo fue expulsado Mauro Silva.