La Organización Mundo Afro de Rivera celebra los quince años de su creación

Diario NORTE dialogó con Adán Parreño, mentor, alma mater, varias veces Presidente de Mundo Afro Rivera, precisamente cuando la institución cumple quince años de su creación.
Parreño recordó que la fundación fue el 18 de marzo de 1995, expresando que “se trata de una institución de la sociedad civil de nuestro departamento que trabaja toda la temática concerniente a los Afrodescendientes desde una perspectiva socio-cultural, tanto a nivel local, como en lo regional e internacional”.
Destacó que “desde sus comienzos se ha caracterizado por propiciar el escenario de análisis y discusión de todas las cuestiones relacionadas a la presencia afrodescendientes: desde la esclavitud, el racismo, la discriminación, la falta de autoestima, la cultura, la religión, los aportes a la sociedad local, nacional y mundial.
Asimismo ha procurado por todos los medios una inserción en la sociedad del colectivo afrodescendiente, para lo cual ha utilizado en forma permanente el diálogo con Autoridades de Gobiernos Nacionales y locales, como es el caso de la Intendencia Departamental, así como la articulación e interacción con otras Instituciones de la sociedad civil de la frontera, del territorio nacional, de América Latina y El Caribe, siempre procurando incidir estratégicamente en los espacios de decisión para alcanzar aquellas políticas que permitan mejorar la calidad de vida del colectivo afrodescendiente” indicó.
Reconoció que la tarea para nada ha sido fácil, especialmente en el entendido que los afrodescendientes pertenecen a un sector pobre de la población, debiendo enfrentarse diariamente con innúmeros problemas”.
Subrayó que “con este panorama son muchos los obstáculos que se presentan, a lo que se suma desinterés de parte del gobierno y población, ante esa realidad”. Dijo que a ello “lamentablemente son cotidianos los embates del racismo y la discriminación, lo que fortalece la idea de trabajar a partir del respeto por la diversidad, como forma de integración, pero esencialmente como manera de intentar caminos de unión entre los seres humanos, partiendo de sus diferencias culturales, orígenes étnicos e ideológicos, sin que ello signifique perder su identidad”.
Parreño agregó que “como toda institución hemos cometido errores y también alcanzamos algunos logros, lejos de los objetivos ideales, pero con la firme convicción de estar luchando por una causa justa que merece toda nuestra dedicación, compromiso, determinación, y una especial vocación de servicio, mirando al semejante con sus virtudes, sus talentos y también con sus carencias y defectos, para de ellos obtener lo mejor para alimentar la esperanza de contribuir a la transformación de la sociedad para que esta sea más justa, solidaria, inclusiva, equitativa, sobretodo para que las diferencias entre las personas no sean otras que las que rezan en la Constitución de la República”.
Finalmente Adán Parreño recordó el trabajo integrado que durante todos estos años han realizado con la sociedad como encuentros, con ámbitos de discusión a nivel nacional e internacional, aportes culturales y sociales.