Rivera, lunes 23 de diciembre de 2024

La infancia y la adolescencia son motivo de preocupación

El Dr. Renato Perurena en su exposición sobre “La infancia y adolescencia, motivos de preocupación”, durante la 40ª Conferencia Rotaria del Distrito 4970 expresó que ellos tienen derecho a la vida, a crecer en un núcleo familiar, a la dignidad, a la educación, a la vivienda, a la identidad, igual que los adultos.
Lo que más preocupa es la escasa capacidad que existe en esos colectivos donde reina la marginación y la pobreza, para salir por sí solos de estas situaciones.
La evolución de la pobreza en nuestro país responde al desempeño económico y la pobreza e indigencia afectan en forma diferente a las generaciones de niños y jóvenes que a las adultas.
En un informe del 2008, los menores de seis años en un 47% son pobres, los de 6 a 12 años son lo mismo, los jóvenes de 13 a 17 años el 40% y la situación de pobreza entre los 18 a 65 años es de un 21% y las personas mayores de 65 años solo un 7%.
La pobreza en el país es de 25% de la población, tiene fuerte incidencia en grupos de jóvenes, el país cuenta con una estructura demográfica envejecida.
También se da otro problema en la familia que en veinte años ha tenido una oclusión. Hay más divorcios, menos casamientos, menos nacimientos, cambios en la formación de las parejas, 83% de los adultos confesó haber castigado a los niños y jóvenes con violencia física o psicológica.
El 90% de las situaciones de violencia, las víctimas lo cuentan diciendo que la violencia emocional es la más frecuente, 80%; tienen maltrato físico, 42% y abuso sexual un 33%.
Las repercusiones sociales y psicológicas son baja autoestima conductas antisociales y académicas, como menor adaptación a los circuitos académicos y mal rendimiento.
“Otro factor que incide en las conductas es la agresión verbal”, dijo el Dr. Perurena. Se ha perdido el léxico, los buenos hábitos, la generosidad.
La violencia adolescente y juvenil, daña a la familia, amigos y comunidad. También deteriora la estructura de la sociedad, la mayoría de los adolescentes que tienen conflictos estudiantiles topo penal, han transitado sin éxito los ámbitos estudiantiles y provienen de hogares sin infraestructura, presentan cuidados negligentes en su desarrollo, se involucran en el consumo de sustancias y actividades marginales de alto riesgo social.
Para contrarrestar estas situaciones deben existir políticas que posean condiciones para que alcancen un desarrollo físico, psíquico y afectivo, prestar servicios de salud y calidad a niños de cero a tres años, control adecuado de embarazo y durante los primeros años de vida fortalecer y expandir los programas de Educación Especial, el Régimen de asignaciones familiares y que sean equitativos los ingresos.
Introducir reformas en la regulación laboral, licencias por maternidad o paternidad, horarios flexibles en las empresas para facilitar los roles materno y paterno.
Además hizo referencia a mortalidad infantil por falta de control a causa de diarreas, males congénitos, afecciones respiratorias.
Pero existen métodos para prevenir toda esta problemática como controles en los niños, la estimulación de la lactancia materna planes de vacunación.
Refiriéndose a la educación y los problemas surgidos con niños manifestó que a pesar de que la repetición de clase tiende al descenso, igual se mantiene elevada, los niños no concurren a clase.
Hay cambios de políticas en la evaluación que se realiza para promover a los niños de clase, pero para que las escuelas cumplan determinados objetivos, para lograr mayores recursos, se miente.
En la educación media hay una deserción enorme, el 40% de los estudiantes son lo que culminan con éxito el ciclo medio de educación y eso produce menor inserción laboral y menor posibilidad de emancipación familiar, de formar capital humano de calidad, que es el que promueve el desarrollo de un país.
Puntos para próximas agendas de trabajo: utilizar la educación, centrar en la cultura de la Paz, considerar a las personas en primer lugar, privilegiar el compromiso y la práctica de valores, asumir el compromiso con la vida, el desarrollo y bienestar humano, fomentar la cultura del diálogo.

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