Cr. Gabriel Gómez no vislumbra grandes efectos negativos por crisis en Rivera
(Por Ariel Rodríguez) En una extensa entrevista con NORTE el Cr. Gabriel Gómez, analizó en profundidad la crisis que afecta la eurozona y las inevitables consecuencias que ello tendrá en la región.
El profesional comenzó expresando que “hay mucha inquietud, esto ya lo hemos vivido en otros momentos, con génesis en diferentes partes del mundo.
Europa a partir de Grecia, pasando por Portugal, España e Italia, aparentemente entra en zona roja.
Evidentemente las crisis financieras derivan en enormes movimientos de capital hacia un lado u otro, en la medida en que hay necesidad de seguridades, de cubrirse.
Las grandes corporaciones financieras mueven fondos en función de sus perspectivas y del entorno de crisis que podría sobrevenir, lo que inevitablemente significa que haya repercusiones.
La economía real del Uruguay aparentemente puede ser bastante ajena a lo que pueda vivirse, pero evidentemente ante un panorama de esta naturaleza las demandas por los productos, el mercado internacional, ya sea en sentido positivo o negativo, puede llegar a sufrir alteraciones, que naturalmente pueden derivar en consecuencias no deseadas para cualquier economía del mundo.
Se trata de situaciones en donde las previsiones se hacen bastante difíciles.
Así hay quienes pronostican una probable valorización del dólar, lo que no parecería ser razonable, con los fundamentos económicos actuales, dado que Estados Unidos aún no logra un equilibrio en su economía y continúa empapelando el mundo con dólares.
En esta materia los marcos de incertidumbres no son buenos.
Tampoco hace ocho años atrás cuando la crisis de 2002 y posteriormente en 2007, tampoco parecía razonable que el dólar se apreciara, pero de última parecería que los agentes económicos dicen en situaciones de crisis el refugio es el dólar y así ocurrió por ejemplo en Brasil, cuando a pesar de la fortaleza de su economía, los inversores prefirieron hacerse de fondos líquidos, retirando sus inversiones de Brasil, lo que significó una gran demanda por dólares que terminó por apreciar el dólar, aunque en el momento ello no parecía factible.
En el mundo de las finanzas este tipo de situaciones pueden derivar en situaciones insospechadas.
En principio hoy el mundo está empapelado de dólares y parecería no podría apreciarse, pero si esta situación desemboca en la decisión de los inversores de refugiarse en el dólar, ello lo va a valorizar, al menos por un lapso de tiempo, sean meses o años, para luego volver al equilibrio necesario.
Son cuestiones puntuales, cíclicos en este caso con origen en lugares del mundo que por experiencia debieran ser ejemplo de cómo conducir las economías, ello ocurrió tanto con Estados Unidos como Europa.
Ya la crisis de 2007 nos señaló la necesidad que la economía debiera reflejarse más en la realidad y no estas finanzas del mundo de papel, en donde se realizan transacciones tras transacciones, todo vía electrónica en una especie de economía ficticia.
Por ello todo conduciría a pensar que la economía debiera tender a simplificarse, pero sin embargo los parámetros mundiales son otros”, acotó.
Finalmente Gómez se refirió a la realidad local indicando que “estamos ante una situación cambiante, que ya hemos vivido.
Hoy estamos en un momento excepcional ante la debilidad del dólar en la medida en que el comercio de frontera se maneja con esa moneda, frente a una moneda como el real que se revaluó.
Naturalmente se trata de una situación que por razones de paridad cambiaria puede variar, pero entiende firmemente que ello sería totalmente coyuntural y acorto plazo.
Entiendo que a largo plazo las condiciones se mantendrán.
La tendencia es al equilibrio, máxime teniendo en cuenta los eventos internacionales como mundial y olimpíadas que organiza Brasil”, finalizó.