UTE amplió presupuesto para obras de electrificación rural en $70 millones
UTE amplió en setenta millones de pesos el presupuesto asignado para las obras de electrificación rural que el Gobierno viene ejecutando para cubrir la demanda insatisfecha. Este año se incrementaron dichos trabajos tras la firma del Convenio Interinstitucional de Electrificación Rural entre OPP, MEVIR, MGAP, MIEM, MVOTMA, Instituto de Colonización, MIDES, UTE y ANTEL, que facilita el acceso a la energía de la población rural carenciada.
Con la nueva asignación, UTE duplicará la ejecución respecto a lo previsto originalmente.
La política de expansión de las redes de electrificación rural para atender la demanda insatisfecha de los pobladores, productores, escuelas rurales y radiobases de ANTEL en el medio rural en los últimos años significó aumentar el ritmo a mil kilómetros por año de redes de electrificación rural.
Este año, como consecuencia de la firma del Convenio Interinstitucional de Electrificación Rural en el que participan articulando esfuerzos la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP) MEVIR, los ministerios de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP), Industria, Energía y Minería (MIEM), Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente (MVOTMA), Desarrollo Social (MIDES), Instituto de Colonización, UTE y ANTEL, para facilitar el acceso a la energía eléctrica con apoyo económico y asesoramiento en especial a aquellos más pobres, se vio incrementado el ritmo de electrificación.
En este contexto, el directorio de UTE autorizó este mes el incremento del presupuesto en $ 70.000.000 adicionales, superando las previsiones iniciales. Algunos proyectos de electrificación rural reciben además apoyo de las intendencias.
El convenio interinstitucional mencionado creó un fideicomiso para la realización de las obras que permite organizar a los vecinos por grupos, y son estos grupos quienes presentan las demandas de electrificación en las mesas de desarrollo rural del MGAP, contratan la empresa privada que ejecutará la obra y acuerdan los montos que pagará cada uno y la forma de pago, ya que el fideicomiso permite financiar hasta en 60 cuotas dichos montos.
En resumen, los pobladores del interior del país se unen, se organizan y realizan un importante esfuerzo económico, el que, a través de los planes de financiación posibilita estos resultados.
Un punto esencial en esta articulación es el subsidio que OPP aporta a este tipo de obra que ronda el 40% del costo que cotiza la empresa, subsidio que permite la viabilidad de los proyectos.
UTE aporta cinco tipos de materiales diferentes a cada obra y ocho materiales si el proyecto incluye una escuela rural; también realiza un anteproyecto, sin costo para los vecinos, que da idea del tamaño del proyecto en cuanto a costo y kilómetros de tendido eléctrico. También hace el control de calidad de la obra y paga a la empresa por avance de obra.
Todo este mecanismo asegura a los diferentes grupos la finalización de las obras y que los nuevos clientes no tengan que pagar un peso hasta la terminación, cuando tengan el medidor en la puerta de su casa.
Para las autoridades, llegar con la electrificación rural al interior del país es parte de un proceso de inclusión social que, tanto OPP como las demás instituciones participantes del programa, consideran de suma importancia para el desarrollo del interior rural, a fin de mejorar la calidad de vida de los vecinos, contribuir a disminuir la emigración hacia las ciudades y potenciar el acceso a las comunicaciones.
A partir de la conexión, las tarifas son iguales en todo el país, a pesar de que los costos de inversión, de mantenimiento y operación de las redes son muy superiores a los de las ciudades.