Productores riverenses visitan el S.U.L. de Cerro Colorado
(Especial para NORTE, por Marcelo Mendonça). En el marco del Proyecto Ovino del MGAP, a través del cual la Dirección de Desarrollo Rural subsidió diversos proyectos productivos tendientes a fortalecer al rubro ovino en nuestro país, tres grupos de productores riverenses de diferentes zonas del departamento, viajaron al Centro de Investigación y Experimentación Doctor Alberto Gallinal (CIEDAG) del Secretariado Uruguayo de la Lana (SUL).
Productores de las zonas de Abrojal, Cerro Pelado, Moirones, Arroyo Blanco, Rincón de los Rodríguez, Curticeiras y Masoller (entre otras), pudieron interiorizarse de los diferentes proyectos de investigación y validación que se están llevando a cabo en el CIEDAG, así como debatir y capacitarse sobre diversos temas que atañen a la producción ovina, relacionados con la alimentación, sanidad y manejo.
Entre los proyectos que están actualmente en curso por el SUL, podemos citar:
– Producción y utilización de pasturas regadas.
– Sistemas de producción ganadero mixtos.
– Evaluación de las principales características de la lana.
– Estudio de una vacuna contra Haemonchus contortus (gusano del cuajo).
– Evaluación de líneas divergentes DEP/HPG.
– Estudio de la resistencia genética del ovino a nematodos gastrointestinales.
– Evaluación de los efectos de diferentes parámetros reproductivos en la producción ovina.
– Estudio de las correlaciones genéticas y efectos en las características productivas de los ovinos.
En la jornada, se realizó una interesante visita de campo a diferentes opciones de pasturas para engorde de lanares y también se abordaron temas sanitarios como parasitosis gastrointestinales y pietín.
Más allá de lo estrictamente técnico, con temas abordados por el ingeniero agrónomo Horacio Norbis, y por el colega veterinario Dr. Pedro Scremini, el intercambio de experiencias entre los productores riverenses, con diferentes realidades (productores medianos y pequeños), diferentes razas (criadores de merino, Corriedale y cruzas), diferentes zonas productivas (basalto profundo, basalto superficial), fue sumamente enriquecedor, poniendo de manifiesto el interés común de todos los integrantes de la jornada: seguir produciendo de la manera más eficiente en un rubro que ha sido muy castigado por el mercado pero que gracias a las bondades del ovino, y la conocida competencia de los técnicos uruguayos, ha sabido sobreponerse y hoy vislumbra un panorama sumamente alentador.
Por Marcelo Mendonça, doctor en Medicina y Tecnología Veterinaria.
