El Dr. Amarilla realizó una encendida defensa de la vida contra el aborto
Explicando los términos, afirmó: “En los fundamentos de los pro abortistas generalmente se intenta derivar la discusión sobre el tema de fondo y afirmar que las diferentes posiciones están basadas en diferencias filosóficas o religiosas, llevando muchas veces el eje de discusión hacia los supuestos derechos de la mujer, cuestiones técnicas, culturales y/o socioeconómicas.
Para nosotros en éste tema sencillamente se pone en discusión el verdadero valor de la vida humana, es decir el derecho humando de primera importancia constituido por la vida misma”.
Recordó y destacó la importancia los conceptos contenidos en la proclama uruguaya del 25 de marzo del 2007, cuando se conmemoró el Día Internacional del Niño por Nacer, “particularmente cuando se expresa que debemos ser conscientes que:
«1) Todo niño por nacer, desde la concepción, es un nuevo individuo de la especie humana, genéticamente autónomo y, por tanto, una nueva persona humana.
2) Por ser persona humana es sujeto de todos los derechos humanos, primeramente el derecho a la vida, desde la concepción y durante todas las etapas de su existencia,.. sin distinción de raza, edad, sexo, condición socioeconómica, estado de salud, tenga o no discapacidad.
3) Es deber irrenunciable del Estado, velar para que todo ser humano sea protegido y respetado, desde el comienzo de su vida en el momento de la fecundación.»
Suscribió Amarilla asimismo, “en un todo lo manifestado en la misma cuando señala que:
a) frente a la desvalorización de la vida, nuestro compromiso con la defensa del derecho fundamental e inalienable de todo ser humano: el derecho a vivir, sin el cual, la lucha por cualquier otro derecho carece de sentido;
b) frente al menosprecio de la maternidad y a la consideración del embarazo como una enfermedad, la valorización de la vocación sublime de la maternidad y su papel insustituible en la sociedad humana; como formadora de personas.
c) Frente a las dificultades y presiones por las que atraviesa la mujer embarazada, nuestra solidaridad activa con las madres embarazadas, que portan el futuro de nuestra nación, y nuestro compromiso de buscar los caminos para que ninguna mujer embarazada en nuestro país dude de traer su hijo al mundo.
d) Frente al engaño de querer presentar el eliminar al hijo como una solución, nuestro rechazo a pretendidas soluciones que solo son una agresión a la mujer y la marcan de por vida. Los que estamos a favor de la vida, queremos ofrecer a la mujer mejores alternativas que el aborto, trabajando por una real igualdad de derechos y reconocimiento de su dignidad.
e) Frente a la realidad de la pobreza, que no creemos que la solución al problema de la pobreza sea la supresión de los pobres, y nos comprometemos a trabajar para que todos los ciudadanos de este país puedan acceder a una vida digna”.
Sostuvo asimismo sentirse “parte de esa gran red de organizaciones que están comprometidas con la defensa de la Vida, nos sentimos parte de ese Movimiento Pro Vida que intenta impedir los embates contra ese derecho esencial. Lucharemos para impedir de que se cruce ese límite de otorgarle a un ser humano la posibilidad de decidir sobre la vida de otro, cuyas consecuencias serán nefastas para cualquier sociedad y puede culminar con terribles genocidios, como los que ya conoció la humanidad”.
“Debemos subrayar -sentenció- Que la vida humana debe ser protegida y defendida en todo momento, desde la misma concepción, hasta la muerte natural y que el aborto en sus diversas formas es un atentado contra la mujer, contra la vida humana y contra el derecho a la vida, y que legalizarlo, del modo que sea, va contra la razón de ser más básica de la comunidad social y política”.
Al finalizar su intervención Gerardo Amarilla solicitó que sus palabras se remitan a todas las Juntas Departamentales del País, a las comisiones de Salud y Derechos Humanos de la Cámara de Representantes y Cámara de Senadores, al Honorable Directorio del Partido Nacional y a la Presidencia de la República.