Sub-18: Se dividieron las aguas y ahora son dos los equipos con posibilidades
En el campeonato juvenil de la categoría sub-18 se partió la tabla arriba y Nacional, que ganó su partido ante Huracán, se va rumbo a la obtención del título de la segunda rueda.
Fue sin duda alguna el mejor partido de la fecha y además el más esperado por todo lo que decidía.
Pero Huracán faltó a la cita porque no jugó, ni por asomo, lo que venía rindiendo hasta ahora en el campeonato.
Pero también hay que destacar las cualidades de Nacional que jugó un muy buen partido y a poco de comenzar el encuentro ya lo fue decidiendo a su favor.
Y no aflojó, hubo superioridad de los tricolores que fueron mucho más a lo largo de todo el partido.
Conquistó cuatro goles y pudieron haber concretado algunos más, hubo error en la definición porque Nacional llegó siempre bien a la última zona defensiva de Huracán.
El descuento del “globito” se dio recién cuando restaban cinco minutos para el final del partido y cuando ya no había tiempo siquiera para pensar en la reacción.
Tampoco dieron resultado las sustituciones que intentó el técnico de Huracán y ni siquiera el ingreso del influyente Ronald Araújo rindieron los resultados esperados.
Con este resultado Nacional se perfila como campeón de la segunda rueda y dependiendo de si mismo para lograrlo porque a pesar que tiene dos rivales importantes en el final, seguramente sabrá sacar provecho de esa situación ampliamente favorable.
Por otra parte Huracán se queda con nueve puntos, lejos, alejado a seis unidades del líder y con seis puntos por disputar.
Lo mismo que Oriental que derrotó a Cuñapirú pero que también se queda con nueve unidades a la espera de varios traspiés de los que están arriba.
Pero lo que importa es que Sarandí Universitario goleó a Lavalleja y que Frontera Rivera Chico le quitó un triunfo que Peñarol ya festejaba.
Los verdiblancos están ahora a tres unidades de Nacional cuando restan seis por jugar, es poco tiempo pero… todavía hay tiempo.
Los aurinegros se quedaron un poco más alejados pero aún con chances, porque tienen rivales a los que les pueden quitar la posibilidad del título.