Sergio Vargas: “Tengo buenos jugadores y espero mucho de ellos”

Está todo pronto para el comienzo de una nueva campaña celeste. La sub-15 sale a la cancha a buscar un título que nos ha sido esquivo a lo largo de todos los años que hemos participado.
Nuestra mejor marca, hace un par de años, con la conducción de Gabriel Eduardo Seguí y Jorge Gustavo Fagúndez cuando llegamos a la instancias de cuartos de finales quedando por el camino luego que un Asistente tacuaremboense nos sancionara un penal que no lo vio nadie (más que él) contra Durazno en nuestro propio Estadio Municipal.
Pero no olvidemos que en esa temporada tuvimos a Carlos Wallace como Coordinador y nada quedaba librado al azar, con una psicóloga y un médico al servicio de la selección.
Con toda la estructura municipal desde la División Deportes contando con cocineras y concentración adecuada, en fin con infraestructura que nunca se había brindado a un grupo juvenil.
Antes y después una participación con escasa preparación, muchas veces sin estructura alguna y en algunas oportunidades con representación de clubes y no una verdadera selección riverense.
En esta oportunidad sucede algo similar porque todo apuntaba a que la celeste no jugara el certamen de la categoría como el año pasado.
Un nuevo error se iba a cometer porque siempre hemos sostenido que sería oportuno, por lo menos un año, no participar en un campeonato de OFI pero en categoría mayor, como para preparar un buen equipo para el año siguiente y depurar la nómina de jugadores que siempre llegan con un desgaste que a esta altura mucho nos ha perjudicado, pero nunca no participar en juveniles que es la base del futuro.
Rivera siempre ha tenido buenos equipos, material humano hay, pero en muchas oportunidades nos ha faltado estructura, empuje, darnos cuenta que el futuro está ahí y no en otras categorías que poco o nada aportan, porque además no son campeones, sino que tienen los mismos defectos que se padecen cuando se va a competir en juveniles.
Lo más claro y reciente de ello, el año pasado, cuando no se quiso gastar en una excelente inversión que era la participación en el Campeonato Nacional sub-15 y se resuelve gastar y participar con una selección mayor que fue lamentable en su accionar y consecuencias.
Ahora Sarandí Universitario tomó la representación celeste desde el punto de vista deportivo.
Todo su cuerpo técnico está al servicio de la celeste y la Liga, y los demás clubes, colaboran en los aspectos logísticos de trámites, cesión de escenarios para entrenamientos y demás.
Hace algo más de un mes comenzaron a entrenar y el cuerpo técnico, encabezado por Sergio Vargas designó a treinta y tres jugadores, donde obviamente la mayoría son del verdiblanco porque es una de las premisas del técnico para mantener la actividad de sus jugadores.
“En Rivera sucede algo que es increíble, porque no le damos actividad deportiva a los juveniles más que un par de meses en el año y se termina. Todos quieren jugar un campeonato muy corto, gastar muy poco y dejar libre a los chicos el resto del año, en Sarandí buscamos que siempre haya actividad, que estén permanente motivados y es por eso que hace unas semanas atrás, nos fuimos con todos los juveniles a una gira por Montevideo donde además de pasear y visitar lugares que muchos desconocían, jugamos partidos amistosos contra equipos profesionales”.
El tiempo que ha tenido el cuerpo técnico no es el ideal, en realidad ha sido muy poco y hay que agregar a ello, el estado del tiempo que siempre ha conspirado contra una mejor preparación.
Llovió mucho estos días y la mayoría de ellos hubo que realizar tareas en espacios libres o en gimnasios, en realidad ha sido casi nula la preparación con un equipo en la cancha.
La suerte es que Sergio Vargas los conoce a todos, que desde el comienzo de los trabajos ya tiene a sus once jugadores titulares en mente y que solamente situaciones puntuales de excelente entrenamiento de otros o defectos de los que están podrán quitarle la posibilidad de ver, en la cancha de San Gregorio de Polanco, al equipo que pensó.
“Pero somos ambiciosos en el proyecto y lo que queremos es ponerlos bien físicamente y si no hemos hecho prácticas de fútbol, vamos a trabajar desde el punto de vista físico, lo hemos priorizado”.
Sergio señala que ha tenido muchas dificultades con los escenarios para entrenar porque se llegaba al estadio y, en realidad, nunca se sabía dónde ir.
“Pero como con mi viejo, mucho aprendí, nos hemos ingeniado para no perder ningún día de entrenamiento y el trabajo del Prof. Gonzalo de Oliveira, ha sido el más importante porque consideramos que tenemos jugadores con muchas cualidades a los que les estaba faltando un buen entrenamiento físico y a eso apuntamos”, señaló. Más información en la edición impresa.