Para unos, sorpresa, para nosotros es la secuencia de un excelente proceso
(Por Freddy Silva). El Campeonato Rivera de Primera División está llegando a su última etapa. Dentro de un par de días se conocerá al campeón y, nuevamente, como ha sido reiterativo en estas últimas temporadas, Peñarol o Huracán levantarán el trofeo.
Mucho se habla, mucho se escribe, mucho se dice, pero la realidad es que este campeonato nos ha mostrado una serie de equipos que marcaron la diferencia y muchos jugadores que ya hicieron méritos más que suficientes como para estar en la consideración del director técnico de la selección celeste.
Pero, sin duda alguna lo realizado por Oriental es digno de un destaque especial, porque no es la primera vez ni obra de la casualidad. Recordemos que los azules estuvieron a un paso de meterse en las finales el año pasado cuando estos gurises tenían un año menos.
No olvidemos que hubo tropiezos, caídas y levantadas a lo largo de este año, y que lograron la clasificación a los cuartos de final en el último partido de la primera fase y con una posición empatada con Bola Ocho que se definió por un gol más en el saldo.
Pero Oriental terminó eliminando del campeonato a uno de los seguros candidatos al título, a quien había obtenido el primer lugar en la tabla de posiciones y que llegaba con aire de campeón y con antecedentes como para ser considerado de esa forma.
Oriental le ganó los dos partidos a Frontera Rivera Chico y el segundo con propiedad, con autoridad y sin sobresaltos. El azul es un equipo joven, muy joven, creo que demasiado, pero, si hay confianza del técnico en el potencial de sus jugadores, tiene toda la razón, porque en la cancha le responden.
Pero lo más importante es que el azul se está aprontando para un período donde seguramente será imbatible y eso puede ser el año que viene, o el otro, porque el día que estos hoy gurises sean campeones, seguramente harán lo que hizo Oriental en el comienzo de los años sesenta del siglo pasado, con varios años de títulos consecutivos.
Por eso hay que saludar, de pie, a este equipo azul, a sus técnicos, a sus jugadores porque ellos creen en sí mismo y eso es muy importante en todo deporte.
EL SALUDO FINAL DEL CAPITÁN
Valentín Silveira, el referente del club, la experiencia en el medio, el que ingresaba para organizar y después dejaba el lugar a otro, escribió en redes sociales lo que se considera una despedida del año con un augurio de mejores temporadas a partir de la próxima:
“¡Simplemente gracias a cada uno que hizo parte de este plantel! Se nos terminó el campeonato, pero ¡muy orgulloso de cada uno! El fútbol es así… se gana, se pierde, pero ¡lo más importante es lo que nos llevamos de cada momento vivido con este plantel! Feliz por haber representado un año más a un gigante como Oriental.
Gracias también a todas las personas que nos apoyaron en todo momento y confiaron en nosotros. El fútbol da revancha próximamente; estaremos nuevamente dando una mano desde el lugar que me toque para dejar a este Club donde se merece. ¡Siempre por encima de todo, Oriental Atlético Club!”.