Rivera, lunes 20 de enero de 2025
Suplemento “El Deportivo”:

Los chicos de Sarandí Universitario vivieron días que no olvidarán jamás

Un grupo de chicos de Sarandí Universitario realizaron un viaje que jamás olvidarán en sus vidas. Para que ello fuera posible hubo dirigentes y padres que se unieron para coordinar cada uno de los detalles del cronograma de actividades que hiciera, de este viaje, algo inolvidable.
Y lo fue tanto que los gurises verdiblancos estuvieron en el Estadio Centenario el día que la celeste mayor se clasificó al Mundial de fútbol de Brasil del año que viene.
No vieron un gran partido pero presenciaron un gran espectáculo con decenas de miles de personas en las tribunas alentando a la selección mayor del país.
Pero también se divirtieron, jugaron al fútbol, recorrieron lugares típicos de nuestra capital y estuvieron en lugares de donde guardan gratos recuerdos.
Al día siguiente al partido ante Jordania estuvieron nuevamente en el Estadio, recogieron césped, atesoran alguna botella de agua que estaba en el banco de suplentes de Uruguay y tiene fotografías de cada uno de los rincones del máxime escenario del país.
Incluso estuvieron en el vestuario y, por un momento, se sintieron Cavani, Suárez o Forlán.
Pero también conversaron con ex-jugadores verdiblancos que hoy están en el fútbol capitalino y que trabajan de una u otra manera en el fútbol, ya sea jugadores, como Galli y Rivas o técnico como Fernando Fadeuille o el propio Thiago Magnone.
Luego a Los Aromos allí conversaron y conocieron de cerca a sus ídolos sin importar si debajo de la verdiblanca había una tricolor o aurinegra porque estaban al lado de Pacheco, de Darío Rodríguez y de todos aquellos a los que solamente lo veían a través de la pantalla chica de la tele.
Por si todo ello fuera poco o no alcanzara, conversaron con Alcides Edgardo Ghiggia, el único jugador que aún está entre nosotros, de aquella gesta heroica de Maracaná y el respeto del puntero celeste del 50 cuando hizo cuestión de pararse para saludar a los chicos verdiblancos.
¿Quién podrá borrar de la retina y la memoria, a estos chicos, lo que vivieron en un par de horas en la capital? Más información en la edición impresa.

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