Regreso con gloria…
Luego de meses de arduo entrenamiento, soportando frío, vientos, y todo tipo de adversidades, el pasado miércoles regresamos de las Olimpiadas Especiales que se realizaron en Los Ángeles, Estados Unidos.
Como entrenador de Ezequiel Damaceno, medalla de oro, y de Marvin Da Rin, medalla de plata, los dos en triatlón, siento una sensación de emoción inexplicable, a tal punto que fue muy difícil entender la realidad.
Estos atletas llegaron a Los Ángeles con la ilusión de realizar el mejor papel posible, ya que eran conscientes que viajaban con bicicletas viejas, conseguidas prestadas a último momento, sin los trajes de neopreno necesarios y obligatorios, y con ropa deportiva heredada de segunda mano. Y todo eso gracias a unos pocos amigos que consiguieron con mucho esfuerzo apenas esto.
Ninguna institución pública, ningún político, nadie con la posibilidad económica de dar una mano a estos chicos se manifestó. Eso sí, el día del regreso y por arte de magia, Rivera fue testigo de un recibimiento espectacular por parte de un sector político del Departamento, prueba clara que no se pierden ninguna oportunidad de rédito.
Pero eso queda para una historia con poca memoria, lo que si quedará marcado para toda la vida es la actuación de estos dos chicos que enmudecieron a una ciudad como Long Beach, ubicada a pocos kilómetros del centro de Los Ángeles, donde no se encontraba ninguna explicación al resultado de una prueba donde las estrellas deberían ser otras.
Personalmente nunca pensé que ellos tendrían el resultado que obtuvieron. No por falta de confianza en su rendimiento, todo lo contrario, pero si por todas la adversidades anteriormente referidas y a la realidad de que era para ellos su primera vez en el mar y en especial su primer triatlón, ya que nunca tuvimos, por razones económicas, la posibilidad de competir en algún otro Departamento de nuestro país.
Ahora es el momento de disfrutar los logros. Es el momento de recomenzar los entrenamientos, es el momento de compartir este éxito con todo Rivera, ya que estos hijos pródigos enorgullecieron en el extranjero a nuestro país y nuestro departamento.
Este martes, a la hora 19:00 en la Plaza de Deportes, un grupo de padres compañeros de Ezequiel y Marvin les realizarán un sentido homenaje, como una forma de agradecer tanta alegría brindada por ellos.
Así que para este buen señor éstos fueron los únicos jóvenes que trajeron medallas y representaron a nuestro departamento? Se olvida de otros seis muchachos que en forma conjunta con Marvin y a Ezequiel también dejaron muy bien representado a nuestro departamento.Es un figurete, viajó el solo un día antes de que los ocho muchachos salieran de Rivera acompañados y a cargo del profesor Nelson Costa, al igual que al regreso de Los Angeles cuando los dejó en el Aeropuerto de Carrasco y se volvió no se en que empresa. Se recibió a los jóvenes y se les realizó un homenaje como corresponde por parte de la Comisión de Olimpiadas Especiales que trabaja en forma silenciosa, que fue la que pagó los pasajes de los ocho atletas a la Empresa Turil la cual obsequió un pasaje para el responsable de la delegación. Así mismo la Intendencia colaboró con los equipos deportivos para que todos los atletas viajaran hasta Montevideo. Le pregunto a este señor si por acaso fue el quien realizó los trámites de pasaporte, visa, si estuvo presente en las instancias previas de preparación de toda la delegación,etc.
Acá debemos felicitar a los ocho jóvenes que se destacaron en las diferentes disciplinas: Ferrón en ciclismo con medalla de bronce, Yonathan, Fernando, Mateus y Xavier en voleibol con medalla de plata, Nicolás en fútbol con medalla de plata, Marvin con medalla de plata en triatlon y Ezequiel con medalla de oro en triatlon. Ellos son los verdaderos protagonistas.