Para 2017, UTE prevé cubrir el 100% de la demanda de electrificación rural del país

UTE prevé cubrir el total de la demanda de servicios de electrificación rural entre 2016 y 2017, ratificó el director de la empresa, Walter Sosa. El directorio inauguró, el pasado viernes, los servicios de electrificación rural en la localidad de Puntas de Molles, Medio Luto y Mangrullo, en el departamento de Cerro Largo, obra que benefició a veintiocho familias.
La obra de electrificación rural en Puntas de Molles demandó el tendido de 21.400 metros de línea monofásica de media tensión y la instalación de nueve subestaciones monofásicas. Estos trabajos permitieron llegar con energía eléctrica a once vecinos.
Asimismo, las autoridades de UTE habilitaron oficialmente los trabajos de electrificación en las localidades de Medio Luto y Mangrullo.
Para electrificar la localidad de Medio Luto se debieron tender 2.100 metros de línea monofásica de media tensión, así como instalar cuatro subestaciones monofásicas, llevando la electricidad a ocho familias, beneficiarios de programas del Ministerio de Desarrollo Social (MIDES).
En tanto, para completar la electrificación de Mangrullo se tendieron 4.600 metros de línea monofásica de media tensión, instalándose además siete subestaciones monofásicas. Estas tareas permitieron que nueve vecinos pudieran contar con electricidad.
El director de UTE, Walter Sosa, ratificó que en función de la demanda actual, la empresa prevé que entre 2016 y 2017 se podrá cubrir la totalidad de la demanda.
En ese contexto, destacó la importancia del convenio interinstitucional firmado oportunamente entre UTE y varios organismos del Estado, lo que permitió concretar una cantidad de obras a consecuencia del apoyo económico que realizó la OPP, subsidiando parte del aporte que los clientes deben realizar para concretar los trabajos.
El jerarca hacía alusión al acuerdo interinstitucional firmado en octubre de 2012 con la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP) y otros organismos del Estado como el Ministerio de Industria y Energía (MIEM), MEVIR, ANTEL, el Instituto Nacional de Colonización, MIDES y el Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP) denominado “Programa de electrificación rural para cubrir la demanda insatisfecha en el interior del país”.
El objetivo no es sólo cubrir la demanda insatisfecha en el área rural aún no atendida, sino también reducir los costos operativos de producción y mantener el asentamiento de la población rural.
“Eso fue muy importante para poder avanzar porque cada vez es más complejo, los poblados están lejos de la red de UTE y por lo tanto el costo de la obra es más alto y además porque se trata de lugares donde la situación económica es compleja”, acotó el director del ente.
Si bien el costo varía en función de las características del terreno, la empresa que contratan los vecinos y los kilómetros de tendido, el costo promedio de cada obra de electrificación rural ronda los 10.000 dólares por kilómetro.
En este sentido, Sosa ratificó que se ha llegado al 99,7% de electrificación rural en el país. “Lo que va quedando son los lugares con más dificultades de acceso y distancia con respecto a la red de UTE y por la situación económica de las familias. Fue por eso que en su momento se acordó el convenio interinstitucional para lograr la sinergia entre todos y alcanzar el 100% de electrificación rural”, insistió.