La muerte injusta de un joven…

(Por Ariel Rodríguez) Seguramente, nos conmovió a todos los uruguayos, la injusta e incomprensible muerte de Wilkerson Saldanha da Cunha, Policías de todo el país acompañaron los restos de su compañero.
Saldanha da Cunha fue ultimado por tres sujetos que lo rapiñaron en Cruz de Carrasco en la madrugada del miércoles 13. Recibió tres disparos en el pecho que fueron detenidos por el chaleco antibalas. Cuando cayó al suelo, uno de los delincuentes le quitó el arma de reglamento y lo mató con un tiro en la cabeza.
Ayer, en Artigas, se vivieron momentos de dolor y congoja durante el velatorio y sepelio del agente. Algunos de sus compañeros de la seccional 14º, encabezados por el comisario inspector Carlos Rodríguez y el comisario Jorge Márquez, acompañaron el cortejo fúnebre que partió a las 6 de la mañana de la víspera de Montevideo y arribó a Artigas a la hora 14.30.
En la jornada de ayer el Comisario Ruben Salvador, acompañado del Cabo Richard Taveira y las Agentes de 2ª Andrea Arregin y Verónica Márquez iniciaron una huelga de hambre, por mejoras salariales para la policía.
Un cartel a la entrada de la empresa funeraria señalaba: “Policías pagan con su vida la inseguridad y el gobierno dice que ganamos bien”.
Ayer, en todas las unidades policiales del país, también se cumplieron honores al agente fallecido tras una orden emitida por la ministra del Interior, Daisy Tourné.
Trascendió que la ministra Tourné señaló, en una reunión del Comité Departamental del Partido Socialista efectuada el miércoles 13, que Saldanha da Cunha estaba cumpliendo un “servicio 223” y no el Servicio 222 como se estaba informando.
En la jerga policial, un “223” significa tareas de custodia que el policía contrata en forma directa con un comerciante o vecino sin la intervención de la Jefatura de Policía.
El dirigente de la CONASIP, Guillermo González, consideró que las declaraciones de Tourné muestran que “la ministra está jugando un juego político asqueante. Nosotros somos policías y no políticos”.
El dirigente de la Mesa Intersindical Policial (MIP) y compañero de seccional de Saldanha da Cunha, Javier Villagrán dijo que el agente ultimado “estaba haciendo tareas de vigilancia” y no realizando actividades ilícitas.
“Antes de poner un manto de dudas sobre el agente muerto, Tourné debía ir a Artigas a consolar a la madre y a la viuda del fallecido”, dijo Villagrán.
Hasta aquí, hechos, noticias periodísticas y tras ellos mucho, mucho dolor y una gran confusión. No podemos dejar, los uruguayos que esto se transforme en tema de disputa partidaria, pues que sea centro de la discusión política está muy bien, es necesario. Que la oposición pida soluciones no debiera sorprender ni irritar, es el libre juego democrático, pero además es saludable, necesario que así sea. Ahora, bien, debe recordar esa oposición que mañana puede llegar a ser gobierno y será rehén de sus dichos. Cuidado con los diagnósticos ligeros o soluciones mágicas, que no las hay. Tampoco es buena cosa, que ante el dolor de una familia, la Ministra, desde un centro partidario intente alivianar responsabilidades, por que lo que hacía el agente no era un 222, sino un servicio de guardia personal. Que la situación es grave lo sabemos el común de los uruguayos. En función de ello es que deben entender todos los sectores políticos que las soluciones hay que buscarla entre todos. Esta situación de la Policía no comenzó en 2005, tampoco el problema de la inseguridad. Se trata de un largo proceso que es evidente ha hecho eclosión durante este gobierno, que al igual que anteriores se ha equivocado. La sensación es que al igual que tantos otros temas que importan a los uruguayos, la problemática policial y la inseguridad, deben ser encaradas con la seriedad y responsabilidad que ellas se merecen, con políticas de estado a largo plazo, con estudios profesionales y ¡por favor!, sin revistas a caballo, ni boleros, que la Institución policial no se merece semejante falta de respeto y saben qué ¡por favor! Sin discursos demagógicos que pinten soluciones que sabemos no existen, la Institución policial se merece respeto, no se lo falten, por uno o dos votos más.
Permítame servirme otra, al fin de cuentas es fin de semana. ¡Salud!