Rivera, viernes 15 de noviembre de 2024
“Efraín, el árbol oráculo de la comunidad”...

Intendente Alma Galup procedió a la inauguración de la Plazoleta de Cerro Pelado

Como informamos en las páginas de NORTE, en horas de la mañana de ayer, viernes 7 de agosto, la intendente Alma Galup Migliarini dejó oficialmente inaugurada las obras de la Plazoleta de la localidad de Cerro Pelado, donde se encuentra el eucalipto, un árbol llamado Efraín, que hace parte del libro “Cerro Pelado, solo para chicos”, editado en el año 1971, de la docente María Elcira Berrutti (1923-2010), bajo el seudónimo de Paula Miranda.
En la oportunidad, la intendente Alma Galup estuvo acompañada de su equipo de gobierno, autoridades civiles, policiales, referentes de la comunidad y familiares de la escritora. Para la Prof. Alma Galup, “es una puesta en valor del libro; el árbol que rescatamos, se ha convertido en una especie de oráculo, porque a través de la lectura del libro, el consejero, el sabio, es Efraín”.
Hicieron uso de la palabra, Clara Berrutti e Ismael Berrutti, quien hace parte de la Sociedad Fomento Rural de Cerro Pelado, la cooperativa que donó el predio de la plazoleta para uso público, y resaltó la importancia del árbol en la comunidad, que es referente y cuenta con un valor histórico. Al finalizar la parte oratoria, procedieron al corte de cinta y descubrimiento de un monolito inscripto con una estrofa del libro, dejando así oficialmente entregada a la comunidad las obras de la plazoleta.
La plazoleta de Cerro Pelado es un espacio recreativo pensado y ejecutado desde la Dirección General de Obras de la Intendencia Departamental de Rivera, a través de la División Arquitectura, Parques y Jardines, la División Alumbrado Público y abastecidos por la Cantera Municipal en lo que refiere a bancos, cordones y columnas, y por el Vivero Municipal con la decoración de flores de lavanda y dietes.

1 comentario sobre “Intendente Alma Galup procedió a la inauguración de la Plazoleta de Cerro Pelado

  1. «Cerro Pelado», un libro que me marcó, de la gran Paula Miranda, mi profesora de Literatura (María Elcira Berrutti). Lo presté un día, para un escritor amigo, nunca más volvió para mis manos.

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