Industria manufacturera en Uruguay creció un 7,5% en octubre
El Ministerio de Industria, Energía y Minería (MIEM) divulgó que la industria manufacturera uruguaya registró un crecimiento interanual del 7,5% en octubre de 2024, según el Índice de Volumen Físico (IVF). Este indicador, que mide la evolución de la producción física del sector, también refleja un incremento acumulado del 1% en lo que va del año. Este desempeño estuvo influenciado principalmente por el reinicio de operaciones en la planta de Ancap, tras una parada técnica que afectó los resultados en meses anteriores.
Sin incluir la refinación de petróleo, la industria manufacturera mostró un crecimiento del 2,4% en octubre, mientras que el núcleo duro industrial, que agrupa actividades más tradicionales y estables, tuvo un aumento más moderado del 0,8%. Al comparar los resultados con octubre de 2019, se observa un incremento del 20,4% en el índice general, un 20,3% en la industria sin refinería y un 7,5% en el núcleo duro.
En cuanto al análisis de las diferentes ramas industriales, 32 de las 53 evaluadas presentaron variaciones positivas, lo que refleja un índice de difusión del 60,4%. La fabricación de productos derivados del petróleo fue la que más contribuyó al crecimiento del sector, con un notable aumento, seguida por la elaboración de alimentos preparados y la producción de pasta de celulosa, papel y cartón. En contraste, actividades como la matanza y preparación de carne de ganado, la fabricación de sustancias químicas básicas y la elaboración de productos a base de arroz tuvieron un impacto negativo en el desempeño general del sector en octubre.
Respecto a los indicadores laborales, los datos muestran una situación más compleja. Aunque el Índice de Horas Trabajadas (IHT) presentó variaciones positivas en la mayoría de las ramas industriales, el Índice de Personal Ocupado (IPO) experimentó una leve caída en todos los agregados industriales. Esta tendencia indica que, si bien la producción física ha mostrado señales de recuperación, las mejoras no se han traducido en un incremento del empleo.
En el acumulado del año hasta octubre, el IVF evidencia un crecimiento del 3% en la industria manufacturera sin refinería, mientras que el núcleo duro industrial registró una caída del 0,9%. Entre las actividades con mayor aporte al desempeño anual se encuentran la producción de pasta de celulosa, la elaboración de alimentos preparados y la fabricación de productos farmacéuticos. Sin embargo, sectores como la refinación de petróleo, la fabricación de vehículos automotores y la reparación de maquinaria fueron los que más impactaron negativamente en el acumulado.
El MIEM concluyó que, a pesar de los desafíos laborales y las dificultades en algunos sectores específicos, el desempeño global de la industria manufacturera muestra signos de recuperación significativa en 2024, especialmente al compararlo con los niveles alcanzados en 2019. Esta evolución refleja un escenario de reactivación para el sector, aunque con retos importantes en términos de generación de empleo y estabilidad en ciertas actividades.