Hoy, miércoles 5 de diciembre, se celebra el Día Internacional del Voluntariado
Como forma de reconocer la labor de todas las personas que integran programas de voluntariado, en 1985 la Asamblea General de Naciones Unidas invitó a los gobiernos a celebrar el 5 de diciembre de cada año como el Día Internacional de los Voluntarios, y los exhortó a adoptar medidas y estrategias para que se cobrara mayor conciencia de la importante contribución que realizan las personas voluntarias en el mundo.
Dentro de las prioridades de Presidencia de la República para el período 2015-2020, se encuentra la construcción de una sociedad solidaria. Por ello, se promueve la participación y el trabajo articulado de todas las dependencias del Estado y de la sociedad civil organizada promoviendo un Programa Nacional de Voluntariado y Prácticas Solidarias en organismos públicos, que profundice la participación social y la democracia. El Programa Nacional de Voluntariado involucra a más de treinta organismos e instituciones públicas.
Esta celebración reconoce a todas las personas voluntarias que desde su participación contribuyen en la construcción permanente de una mejor sociedad, resultado de los esfuerzos conjuntos entre gobiernos, organizaciones de la sociedad civil y personas.
Este año, el Día Internacional de los Voluntarios se celebra bajo el nombre “Los voluntarios construyen comunidades resilientes” (la resiliencia es la capacidad que tiene una persona o un grupo de recuperarse frente a la adversidad para seguir proyectando el futuro). De esta manera, se reconoce especialmente a los voluntarios que contribuyen a generar #CiudadesResilientes frente a desastres naturales y tensiones económicas. El tema de la campaña combina el reconocimiento de las personas con pruebas concretas del Informe sobre el estado del voluntariado en el mundo (SWVR) 2018.
Para el Sistema Nacional de Emergencias (SINAE), como instancia específica y permanente de coordinación de las instituciones públicas para la gestión integral del riesgo de desastres en Uruguay, esta celebración toma mucha relevancia para el reconocimiento a la contribución que sus voluntarios y voluntarias realizan para la instalación de una cultura preventiva en Gestión Integral del riesgo en Uruguay.
Desde el 2016 se desarrollan acciones conjuntas con el Programa Nacional de Voluntariado y la Dirección Nacional de Políticas Sociales (MIDES), para la incorporación de la figura del voluntariado a la institucionalidad del Sistema Nacional de Emergencias a través de la elaboración y ejecución de estrategias en la gestión integral del riesgo, con foco en la generación de una cultura preventiva en todo el país.
Para contribuir a instalar una cultura en gestión de riesgos, facilitar procesos de diálogo e identificar necesidades y alternativas desde un enfoque participativo, se han orientado las acciones a instalar capacidades locales y construcción de resiliencia comunitaria, a partir de la formación de voluntarios como promotores de prevención. Este proceso para la conformación y consolidación de una Red Nacional de Personas Voluntarias del SINAE ha nucleado a 235 personas de dieciocho departamentos del país desde 2016.
De ese total, el 67% son mujeres y 33% hombres, correspondiendo un 22% a habitantes de Montevideo y un 78% del interior del país. El mayor porcentaje de personas voluntarias se concentra entre los 41 y 50 años (33%) y en jóvenes entre 21 y 30 años (27%).
A través de un trabajo interinstitucional con el Área de Educación Ambiental de la Dirección de Educación del Ministerio de Educación y Cultura, los Centros Coordinadores de Emergencias Departamentales (CECOED) y el Ministerio de Desarrollo Social, se ha consolidado el voluntariado en territorio, celebrando en este año la incorporación de personas voluntarias en más de treinta actividades llevadas a cabo en catorce departamentos del país, contabilizando unas cuatro mil quinientos horas de trabajo.
Todos nuestros voluntarios y voluntarias se sienten identificados con la misión y los objetivos de #VoluntariadoSINAE. Mediante diversas acciones, canalizan su participación activa en la sociedad con su capacidad multiplicadora que nos permite continuar instalando una cultura preventiva en Uruguay.