El General de Infantería Hebert Fígoli brindó una charla sobre seguridad social militar

(Por Rosa Dutra) En la tarde del pasado jueves, en el Centro de Retirados Militares, se brindó una charla con el General (R) de Infantería Hebert Fígoli, sobre la seguridad social militar y los duros momentos que hoy enfrentan ante un eventual impacto de la reforma del sistema de Retiros y Pensiones Militares que el Gobierno Nacional estudia realizar.
Una gran cantidad de militares retirados y sus familiares se hicieron presentes para escuchar la disertación del Gral. Fígoli. Previo a la charla, NORTE dialogó con el disertante con la finalidad de que nos explicara de que se trata la reforma propuesta.
Manifestó que está visitando varios departamentos del interior del país para informar de aspectos relacionados con la seguridad social del militar. Ello hace referencia al eventual impacto que puede tener la reforma de Retiros y Pensiones Militares, pero con foco prioritario en la probabilidad de que se les impute un segundo tributo, similar en el alcance al IASS (Impuesto de Asistencia a la Seguridad Social).
Esto haría que, si se aprueba este nuevo impuesto, a partir del 1 de enero de 2017 habrá pasividades que tendrán una imposición de un 40% o un 50%, equivalente a una reducción de los haberes de retiro o de pensiones en esos montos. “Será más que preocupante”, sentenció.
Consultado si habían mantenido contactos con políticos de todos los partidos para buscar soluciones el problema, respondió que se han mantenido contactos con todos los representantes partidarios con representación parlamentaria. Se reunieron con las Comisiones de Defensa y con las Comisiones de Presupuesto del Senado y de la Cámara de Diputados, para ponerlos en conocimiento de lo que son sus opiniones sobre los temas.
“Los más afectados con este proyecto de impuesto, ya que aún no ingresó al Parlamento, serán los que perciben haberes de retiro o pensión superiores a los cincuenta mil pesos. Será un impacto más que significativo. Podrá afectar en forma profunda a la sanidad militar, a profesionales médicos, enfermeros, nurses equiparados, que ante esta situación prefieran irse o retirarse. Con ello se producirá un verdadero descalabro de la salud militar. Además el impacto que podrá tener en los activos”, expresó.
“Este tema -acotó- lo manejan los Comandantes en Jefe, porque estos activos mañana serán pasivos y hoy se habla de determinada suma de déficit, que no está en términos de déficit, ya que no somos Caja Militar, somos un servicio, porque no tenemos autonomía financiera ni administrativa”. Expresó que “cree que es una medida totalmente política y no financiera”.
Consultado sobre qué medidas adoptarían y cómo reaccionarían si se concretara este impuesto, señaló que han tenido reuniones masivas en Montevideo. En el Club de la Fuerza Aérea congregaron a más de mil trescientas personas. Visitaron Maldonado, ahora irán a Melo y a Salto, pues desean que el interior no sienta que fue olvidado.
Desean llegar al interior, ser escuchados y recibir sugerencias, aportes, preguntas. La situación que viven “tiene aspectos y matices de política tributaria, administrativa”. Ellos son soldados, aunque tienen sus asesores, explicó.
Para el caso concreto del tributo, aún tienen la esperanza que este no llegue al Parlamento, pero si llega se seguirán manteniendo conversaciones con los legisladores. Desean que no prospere la acción, pero si prospera tienen “todos los recursos legales y jurídicos para llegar a lo más alto”, porque entienden que no pueden ser tributados doblemente por el mismo hecho generador.
Necesitan “una masa crítica que entienda el problema y que, dentro de la Constitución, las leyes y las normas, se pueda hacer sentir”, concluyó. Fotografía: Edilberto Chalela.