Dolor y Tensión en la despedida a Oseas Pintos
El Ministro de Interior, Eduardo Bonomi, arribó pasadas las 9:00 al aeropuerto “Oscar Gestido”, trasladándose directo a Jefatura de Policía de Rivera. Allí mantuvo una reunión con el Insp. Ppal. Heriberto Fagúndez, cuyo tenor no trascendió, aunque se supone se abordó lo concerniente al traslados de ciento veinte reclusos, provenientes del COMCAR, a la Cárcel de “Cerro Carancho”.
Allí estaba presente NORTE, sin embargo un funcionario del Ministerio del Interior, comunicó que el Ministro no brindaría declaraciones a ningún medio hasta después del sepelio.
La cuadra de Florencio Sánchez, entre Uruguay y Fructuoso Rivera, en donde está ubicada la sala velatoria de Empresa Perroni, había sido cortada al tránsito vehicular y ya muy temprano se veía mucha gente. Hasta allí habían llegado policías de todo el país, especialmente desde el Instituto Nacional de Rehabilitación (INR). Caras adustas, tristes, preocupadas.
Poco antes de las 10:00 horas arribó al lugar el Director Nacional del INR, Alcides Caballero. Posteriormente arribó el Ministro Eduardo Bonomi, ingresando directamente a la sala velatoria. Ambos jerarcas descendieron de los vehículos ante la total indiferencia de los efectivos allí presentes.
Sobre las 10:30 horas aproximadamente arribó el Diputado Julio Fernández acompañado de Rubenson Silva. Lo hizo también el Diputado Gerardo Amarilla, mientras que poco menos de las 11:00 horas llegaron, a saludar el Intendente Marne Osorio, el Senador Tabaré Viera, el Diputado Richard Sander y el Secretario General de la comuna Abilio Briz.
David Cardozo Alves, el otro policía riverense amigo de Oseas, que fuera herido por Brasil, ayudado con muletas llegó al velatorio sobre las 10:00 horas, siendo saludado por sus compañeros.
Presidente Viera y especialmente el entorno del Cementerio Central presentaban un marco impresionante de público agolpado en las aceras, que esperaba respetuoso.
Alcides Caballero, Director del INR fue el responsable de la despedida. Se dirigió a los padres de Oseas recordándoles que habían tenido un buen hijo, querido por sus compañeros y dedicado a su función, subrayó que “alguien ingresó un arma de fuego al establecimiento, lo que se trató de un hecho inédito, inexplicable y nunca ocurrido en un establecimiento carcelario. Esto merece una reflexión de todos nosotros, sobre todo de quienes tenemos que ver con el sistema penitenciario uruguayo”.
Agregó que Oseas “trabajaba en un lugar muy difícil como lo es el Penal de Libertad, lugar en el que están privadas de su libertad las personas de mayor peligrosidad”.
Posteriormente uno de sus compañeros leyó una misiva dirigida a los familiares de Oseas presentes, en donde destacó la personalidad del joven asesinado vilmente y la importancia de la tarea que cumplen.
Fotografías: Edilberto Chalela.