El Colegio Rodó celebra en octubre sus Bodas de Plata
NORTE dialogó con una de sus Directoras, la Mtra. Mary Tania Rodríguez, para conocer más detalles sobre sus comienzos; haciendo un balance de la historia del Colegio, señaló que es muy positivo. El 1 de octubre de 1990 comenzaron las actividades, cuando recibieron la primera inscripción. Esta significó un voto de confianza de muchos padres de la comunidad. Luego, en el mes de marzo siguiente comenzaron las clases.
A partir de ese momento comenzó un período de crecimiento. Comenzaron con grupos de educación inicial hasta segundo año de Primaria. Cada año fueron creciendo junto a sus alumnos. Hoy aquellos pioneros son profesionales, padres de familia, empresarios.
Al crecer, el Colegio quedó habilitado para ejercer la Educación Primaria y Secundaria, en su primer, segundo y tercer ciclo. Se impartían también idiomas: español, portugués e inglés. Con el inglés en el transcurso de los años, conquistaron ser sede de la Universidad de Cambridge inglesa y pudieron tomar exámenes. Algo que en nuestro medio solo lo tenía el Instituto Anglo, por su antigüedad.
Cuando tuvieron la idea de crear el Colegio, eran docentes jóvenes y se dieron cuenta que la educación que se impartía no daba respuestas a las necesidades, no solamente del punto de vista educativo sino de otras técnicas, como la informática que -de cierto modo- recién comenzaba, la necesidad de impartir más idiomas, y la valorización de la educación física, cosas que sentían que formaban parte del medio.
La respuesta que tuvieron de parte de las familias que deseaban que sus hijos tuvieran una educación integral no se hizo esperar. Los padres de esta frontera respondieron afirmativamente e inscribieron a sus hijos en este centro educativo. Señaló que hoy un gran porcentaje entre los alumnos es santanense.
Actualmente, entre primaria, maternal, iniciales y secundaria, cuentan con un total de doscientos veinte alumnos; el cuerpo docente permanente más auxiliares de servicio suman un total de ochenta y tres personas. Con relación a los niños pequeños, comenzaron con niños de tres años. Luego se incorporaron los de dos años, con veintidós alumnos. Luego, a pedido de los padres, surgió el Maternal.
Cuentan con un kínder, donde se atiende a los chiquitos de nueve meses, con un sistema de mayor horario que comienza a la hora 8:00 y se extiende hasta las 19:00 horas, en un régimen de guardería. Son atendidos por personas que tienen el curso de baby-sitter, quienes desarrollan actividades recreativas que estimulan el lenguaje.
También se realizan cursos para personas ajenas al Colegio. Estos cursos comenzaron luego que firmaron un convenio con el Instituto Crandon. Entre ellos figuran los cursos de administración en la parte de auxiliar administrativo, y de recepcionista telefónica.
Para los alumnos que concurren a otras instituciones del medio, ofrecen los cursos de inglés, en un horario especial vespertino. Organizan jornadas, seminarios y charlas para la comunidad trayendo a especialistas. Citó como ejemplo la charla que habrá el martes 10 de noviembre, con el psicólogo Alejandro de Barbieri, de gran prestigio por su vinculación con instituciones educativas. Dicha charla estará destinada a padres y docentes. El objetivo es sobre la relación que debe existir entre padres e hijos, docentes y alumnos, y cómo manejarla.
Comparten su idea que el padre es responsable y el docente también lo es; el alumno debe respetarlos y la tolerancia debe ser mutua. La solidaridad debe existir; el deber de orientación deben tenerlo docentes y padres. Desde la Institución comparten la idea de la responsabilidad, convertida en la formación del niño y del joven, por eso invitaron al psicólogo Alejandro de Barbieri a dictar dicha charla.
“En estos tiempos en que la educación está siendo cuestionada, desde el Colegio se trabaja en los valores de los alumnos, porque el respeto es prioritario para no generar situaciones de violencia”, dijo. Allí “los recreos son tranquilos”, y los profesores tratan de hacer actividades que vinculen a la comunidad.
Una de ellas, es que los grupos de música en la zona de Mandubí, la comparten con esos jóvenes que no tienen posibilidades de acceder y desean insertarse en el sistema educativo. Son actividades de inserción que realizan sus alumnos fuera del horario escolar.
Nuestra entrevistada se refirió a la programación aniversario, que comenzó en el mes de setiembre y se extiende hasta diciembre. Esta se viene cumpliendo todos los años y se trata de actividades diferentes: artísticas, deportivas, olimpíadas de matemáticas, ajedrez, competencias de lectura. Cada año seleccionan tres actividades para concretar, porque en cada grupo el docente referente del grupo, elige cual será la actividad, luego lo integra a los demás. Se pretende con todo esto brindar una enseñanza personalizada, con un número reducido de alumnos, para lograr ese objetivo.
Finalizando la nota, se refirió a la actividad del Festival de Danzas que se realizó ayer en el Teatro Municipal “15 de Febrero” (en la fotografía). El tema elegido fue homenajear a diferentes personas que dejaron un legado para la Humanidad, como el activista contra el apartheid, político y filántropo sudafricano Nelson Mandela, la estudiante pakistaní Malala Yousarfzal o el médico y bacteriólogo Alexander Fleming. Además, hubo otros homenajeados de gran relevancia internacional.
Dejó un mensaje diciendo que “todas esas personas homenajeadas soñaron con la integración, con la paz, con la educación”. Porque todo comienza con un sueño, como lo hicieron con el Colegio, usando los espacios de libertad para introducir temas nuevos, traer al medio una tecnología diferente, trabajar con los alumnos de forma distinta, brindar una enseñanza personalizada, para conocer bien a todos los alumnos.
Buscar con la teoría de las inteligencias múltiples que cada uno de nosotros poseemos, una habilidad especial, cultivar el aspecto artístico, educar y estimular en cada uno la sensibilidad, trabajar mucho la parte espiritual, para que no se manifieste la violencia. Apreciar la obra de los demás y la suya, aprender que nuestros espacios no pueden ser invadidos por otros, hacer valer nuestros derechos sin presionar ni pisotear a los de los demás, saber que la conquista se logra con el diálogo, convencernos que somos capaz de lograr triunfos. Fotografía: Edilberto Chalela.