Día del Maestro: Una vocación que deja una huella indeleble en la vida…

En la jornada de hoy, jueves 22 de setiembre, se conmemora un nuevo Día del Maestro, una fecha más que significativa no sólo para el Consejo de Educación Inicial y Primaria sino también para toda la sociedad, ya que a través de este festejo se recuerda el desempeño esencial y cotidiano de estos hombres y mujeres que han hecho del Magisterio una profesión comprometida y vocacional desde la que, de forma singular, en cada una de las aulas y cada una de las escuelas públicas, se construye el futuro y la identidad del país.
Luego de los padres y del entorno familiar, los primeros cimientos que reciben los niños en cuanto al aprendizaje, a los valores, a las formas de construir relaciones sanas, de saber resolver peleas y enojos, y en definitiva, de crecer como personas libres, proviene de los maestros, quienes a través de su cariño, compromiso y vocación van abriéndoles puertas y ventanas al mundo que los rodea.
La calidad de la educación, como un derecho fundamental, sólo es posible de la mano de maestros responsables con su trabajo, formados excelentemente y, sobre todo, reconocidos por la sociedad. El carácter vertebrador del Magisterio uruguayo es indudablemente un eje fundamental en la conformación e integración misma del país y en la definición de su identidad.
El desafío cotidiano de los maestros es tener en sus manos el futuro, dado que el país del mañana será el resultado, indefectiblemente, de lo que hoy, ahora, en el presente, ellos construyen en sus aulas y escuelas.
Libertad, respeto, tolerancia, buenos modales, vínculos sanos con el otro, solidaridad, compromiso… todos estos valores son los que el maestro trabaja a diario con los niños, por eso debemos valorarlos, respaldarlos y acompañarlos en su tarea. Por eso, cada año, debemos celebrar un Día del Maestro convencidos de que tanta responsabilidad debe ser sostenida por toda la sociedad, por todas las familias, por cada uno de nosotros.
Vale recordar que el 22 de setiembre fue declarado Día del Maestro por resolución del entonces Consejo de Enseñanza Primaria y Normal el 17 de agosto de 1939, con el fundamento “de la dignificación del Magisterio mediante el reconocimiento de su noble misión en acto público”.
En este sentido, el actual Consejo de Educación Inicial y Primaria (CEIP) definió, como objetivo de política educativa, el reconocer y prestigiar a la Escuela Pública y al Magisterio en el entendido que la “jerarquización y el desarrollo de la función docente constituye uno de los desafíos más requeridos por los colectivos profesionales”.
El Día del Maestro es, entonces, una oportunidad para honrar a una profesión llevada a cabo por hombres y mujeres que hacen de su vocación un compromiso de vida con la escuela pública.

De la Asociación de Maestros de Rivera:

22 de setiembre de 2016: Día del Maestro

Esos locos que enseñan, yo los conozco, son raros… en verano les dan vacaciones pero no desconectan del todo, piensan en sus clases, preparan tareas para el curso siguiente… sus gargantas siempre están doloridas pero siguen enseñando con cariño e ilusión.
En tiempos de clases, también se llevan trabajo a sus casas. Yo los he visto,… no están bien de la cabeza… salen de excursión y se encargan de gestionar autorizaciones, recogida de dinero y responsabilidad extra.
Qué será de ellos y ellas… por las noches sueñan con la escuela, se les aparecen planetas, ecosistemas y personajes históricos. Son hombres, mujeres, casados, solteros, de diferentes edades, pero a todos les apasiona su trabajo… ver crecer a sus alumnos, ayudarlos y verlos convertirse en ciudadanos solidarios. Disfrutan de lo que hacen aunque haya quienes los critiquen.
Fuera de su horario de trabajo se dedican a hacer cursos y no les importa perder tiempo de ocio para reciclarse. Dicen que son autocríticos y que hacen balances de sus experiencias educativas y se frustran cuando las cosas no les salen como esperaban y se alegran cuando sus estudiantes avanzan.
Conocen a sus alumnos y saben que muchas veces se portan mal porque se sienten mal, y están siempre dispuestos a ayudarlos. Son raros… están muy atentos a hacer cumplir el derecho a la educación de todos y con todos, aunque ello les signifique más trabajo y ello sea un desafío en una sociedad que todavía excluye. Saben que quien no aprende a convivir con las diferencias se educa para la discriminación y la exclusión.
Dicen de algunos que fueron muy importantes, que siempre tienen palabras de aliento para sus alumnos. Dicen sólo que son maestros y que se sienten muy orgullosos de serlo.
Si conoces a alguno salúdalo porque hoy es su día. ¡Feliz día a todos los maestros!
AMDER, Asociación de Maestros de Rivera.